Y todo entre nosotros ha cambiado. Ya no existe lo que había en un principio. Aún no sé cuál es el motivo de esta transformación. Me ha sorprendido por completo, porque siento que ya no te reconozco. Puedo decir casi con certeza que no sé quién eres.
No me di cuenta de este cambio, no sé en qué momento pasó. Lo único que sé es que fue poco a poco. Comenzaste a comportarte de una forma que antes no lo hacías. Tu comportamiento conmigo comenzó a cambiar, pero de forma negativa. El amor que nos teníamos desde un principio no es el mismo que hay ahora. La relación comenzó a deteriorarse con tu comportamiento. Los momentos comenzaron a volverse incomodos. Estábamos discutiendo siempre, pasándola mal. Ya no había buenos momentos. Se sentía como si tu amor se hubiera extinguido.
No sé si en la primera etapa de nuestra relación estuviste fingiendo. Verdaderamente no lo sé, y no quieres hablar sobre el asunto. Me dices que no has cambiado, que siempre has sido así, sólo que soy una persona tan despistada que nunca me he dado cuenta. Es la excusa que me das para no decirme la verdad. Porque la verdad es que ya no estás enamorado de mí y por ello el cambio de tu actitud.
Ahora eres una persona muy arrogante, apática, siempre paras de mal humor. Nunca quieres hacer nada conmigo, siempre me dices que te encuentras ocupado. Esa actitud tan negativa hacia mí sólo puede significar una cosa y esa es que ya no me quieres como que quisiste en un principio.
Existe un momento en la vida en que el amor se termina. Puede suceder porque nuestros días se ha vuelto tan cotidiano, tan lineal que no hay ninguna emoción. Puede ser que nuestra relación no sea como antes, pero no por eso puedes cambiar de ese modo tu actitud. Dañándome, ocasionando que yo me cansé de ti y te saque de mí vida, pensando que así voy a sufrir menos.
Que equivocado estás, es mejor ser directo. Hablar sobre el asunto y resolverlo de una forma diplomática. Si no me quieres no puedo yo exigirte a ese sentimiento. Es doloroso, pero es mejor decírmelo de frente que estar ilusionándome que en algún momento todo va a ser como antes.
Por ello, la comunicación en una relación es muy importante. Porque así uno se puede expresar y resolver de forma inteligente, los inconvenientes que está teniendo la relación. Conversando siempre se llega a un acuerdo mutuo.