No hay colmillos ni ojos inyectados en sangre, pero luego de conocerlo, poseemos la impresión de que toda la energía y la intención de vivir nos dejó. Un vampiro emocional nos hace sentir mal, débiles, cansados, atrapados.
Y cuanto peor es nuestro estado de arrojo, mejor se siente esa persona, como si se estuviera alimentando con nuestras emociones.
¿Cómo admitir a los vampiros sentimentales? Es dependiente de cuál, puesto que hay diversos tipos de vampiros psíquicos: Narciso: el planeta da un giro a su alrededor, atrae la atención a toda costa, quiere sentir la admiración de los otros. Siempre jura reunirse en toda clase de fiestas, él te contará los datos de su historia en aspecto y, si no escuchas con atención, te atacará. No te dejes atrapar, no intentes agradar al narciso, eso te quitará toda tu energía, asegura tu sensibilidad y tu autovaloración.
Víctima: Este tipo de vampiro emocional es quien siempre está infeliz, dice que todos están contra él, él aún está intentando encontrar a “mamá”, la cual va a venir a rescatarlo… De hecho, él no se va a hacer jamás responsable de sus acciones y elecciones. No te dejes estafar, colocale parámetros.
Controlador: dicta lo que debemos sentir, tiene una opinión sobre cada tema, él hace todo muy bien y sabe que nadie lo va a hacer mejor. Sin ser invitado, con bastante gusto te va a proporcionar consejos y te va a decir que es lo que tienes que llevar a cabo. No intentes controlarlo, establece parámetros, impide llevar a cabo confrontaciones sobre inconvenientes inferiores, puesto que de lo opuesto saldrás sin energías de estas confrontaciones.
Crítico: él siempre puede ubicar deficiencias en todas las cosas, personas y ocasiones y las publica o dice donde puede. Piensa que la crítica hacia los otros es su deber sagrado. No te defiendas, no te enojes, en ocasiones la preferible respuesta es el silencio, otra forma de evadir a este vampiro emocional es agradecer su crítica para dejarlo desarmado.
Camaleón: en su mundo todo es blanco o negro. Al inicio, él te seduce, te pone en un pedestal para después dejarte caer. Si se siente rechazado, te va a cambiar de ser su amigo al peor enemigo en un momento. Algún cosa puede ofenderlo, trátalo como a un pequeño histérico de cinco años, con tranquilidad, con comprensión, pero con firmeza y constancia. Si puedes, huye lejos de este tipo de vampiro.
¿Cómo puedes protegerte de los parásitos psíquicos ? Los vampiros sentimentales trabajan de diferentes formas, pero la señal más indicativa de que nos encontramos frente a un real vampiro emocional es la sensación que nos queda después de estar cerca de ellos, el sentimiento de vacío, de malestar y preocupación que nos dejan encima es muy visible y pertence a las propiedades que tienen todos ellos, la de drenar nuestra energía y agotarnos emocionalmente.
Estos son ciertos avisos que tienen la posibilidad de guiarte a protegerte contra estos vampiros sentimentales.
Reconocer la amenaza
Todos tenemos la posibilidad de tener en algún instante de nuestra vida algún accionar semejante al de ellos, quiero decir que esperar comportarnos como víctimas, manejar sutilmente a alguien para hallar algo a cambio, decir alguna asistencia para hallar lo que buscamos; estos hábitos tienen la posibilidad de considerarse “normales”, el inconveniente es cuando estos hábitos son formas de proceder y son el exclusivo medio de interacción que sirve para tener relaciones con las otras personas.
Entre otras cosas, la persona que es un vampiro emocional debe alimentarse todo el tiempo de los otros. Merece escuchar las críticas de otros, fundamentalmente cuando dependemos de un vampiro y alguien está intentando de abrirnos los ojos.
Mira la oposición de los niños Los jovenes intuitivamente perciben la manipulación, puedes prestar atención a la oposición de los jovenes cuando están en presencia de un individuo con estas características; los jovenes son con transparencia en sus emociones y tienen la posibilidad de ubicar hábitos falsos y manipulativos como los que utilizan los vampiros sentimentales. Escucha la oposición de tu cuerpo Jamás fué una mentira, de acuerdo con la psicoanalista Alice Miller.
Comprueba cuándo y con quién te sientes mal: agotado, deprimido, atrapado, privado de valor, fastidioso. El cuerpo es un indicio fenomenal, lamentablemente, muy comunmente no nos encontramos tan conectados a él para tomarlo presente. Abandona la ilusión de que vas a cambiar a un vampiro Si él no hace un enorme trabajo en la transformación mental, no tendrás la posibilidad de llevar a cabo nada por él.
En relación del tipo de trastorno de personalidad que padece el vampiro emocional va a ser el trabajo que necesita su régimen, no obstante, esto solo le se ajusta a la persona, y tú no puedes hacerte cargo de sus responsabilidades. Aumenta la distancia Si solo hay vampiros a tu alrededor (hay ámbitos expertos donde esto sucede), utiliza el consejo de la psiquiatra Judith Orloff. Aléjate a una distancia de por lo menos 6 metros y respira intensamente. Esta es una forma eficaz de salir de su región de predominación.