En un vaso lleno ya no cabe agua. Este es uno de los principios fundamentales de cualquier tipo de cambio. Es imposible cambiar drásticamente tu vida y reescribir tu historia si no dedicas un tiempo para hacer limpieza en la maleta de tu experiencia acumulada.
Tu rompecabezas de la vida siempre se juntará en la misma imagen si utilizas los mismos elementos, no importa cuántas veces revuelvas las piezas.
Propongo empezar con el presente. Es la dimensión más concreta porque está situada aquí y ahora. Deshacerse completamente del tiradero que está en tu interior y en tu entorno, te otorgará muchas fuerzas y energías frescas, lo cual vas a necesitar más adelante.
Lo principal es quitar de tu lista de tareas los asuntos colgados en el aire
Quiero destacar que no te invito a pulir tu presente tal cual una Cenicienta (aunque también sería muy útil), para empezar, tienes que ordenar tus asuntos y cerrar las tareas pendientes desde hace tiempo. Si no las puedes realizar, cancélalas. Debes eliminar de tu lista de espera o reiniciar todas las tareas que se encuentran ahí durante unas semanas. Esto te dará una enorme fuente de energía nueva.
Ahora te lo explicaré con más detalle. Estas son las cosas que harán en los próximos días aquellas personas que quieren formar una nueva imagen de su experiencia:
1. Desecha la basura
Bota toda la basura. Para empezar, de tu casa. Tira, regala, dona las cosas que no necesitas. Pero no guardando las cosas en una caja y pensando regalarlas algún día. Realmente hazlo. No dejes nada en tu lista de espera.
¿Qué significa la basura?
Es todo aquello que no necesitas. O mejor dicho, aquello que no has usado en el último año, debe ser tirado-regalado-donado-desechado:
— La ropa que no te pones.— La mayor parte de baratijas, menos aquellas que realmente crean comodidad en tu casa (créeme, es una parte muy pequeña).— Platos que no sirven, aparatos electrónicos descompuestos.
Cuanto más cosas encuentres, mejor para ti. Entiende que cada cosa, literalmente, cada cosa es parte de tu energía. Míralas fríamente y únicamente lleva a tu nueva experiencia aquellos objetos que realmente necesites o que te alegren. Abarca esta tarea con la siguiente pregunta: “¿Quiero dejar esta energía o liberar lugar para una nueva?”
A un vaso lleno no se le puede echar más agua.
Tú mismo vacías tu vaso. La cantidad que vacíes, es la misma que verterás. Si te da lástima tirar agua, no te sorprendas del por qué no llegan cambios a tu vida: simplemente no hay lugar para ellos.
Total, la limpieza general de tu casa es un juego llamado “¿Qué tanto estoy dispuesto a abrirme para tener nuevas experiencias?”
De acuerdo a la cantidad de cosas que deseches, sabrás si estás preparado o no para algo así.
Por cierto, esto aplica para todos tus espacios incluyendo tu oficina, el jardín de tu casa, tu auto, un avión privado o lo que tengas. Sorprende a tus colegas: limpia a fondo tu escritorio, empieza el proceso de renovación.
2. Borra archivos
Tirar la basura no es nada. Porque también llegó la hora de borrar archivos. ¿Cuánto tiempo gastas en tu computadora o en la red? También es tu espacio, no importa que sea virtual, por lo tanto, también es parte de tu energía.
Estamos acostumbrados a almacenar todo en la computadora. ¿Para qué borrar? Si todo cabe en el disco duro.
El principio que se aplica aquí es el mismo: limpiamos, por lo tanto liberamos energía. Deja únicamente aquello que te gusta o que representa algún valor emocional para ti. ¿Para qué almacenar una película que ni siquiera te gustó? ¿Para qué tener archivos viejos inútiles? Todas esas cosas son parte de ti, algo que estás cargando contigo. Cuanto más peso lleves, menor es tu velocidad. ¿Quieres ralentizar tu vida? o liberar espacio para algo nuevo.
No solamente tu computadora personal requiere una limpieza, sino también tu computadora del trabajo y todas tus cuentas: de redes sociales, blogs, sitios web, etc.
3. Ordena la casa, asigna cierto lugar a las cosas, sistematiza los archivos.
Nunca he sido partidaria de una limpieza severa, incluso durante mucho tiempo apoyé un desorden creativo teniendo como pretexto mi amor por el arte.Ahora te diré lo siguiente: un orden armonioso (no fanático, sino sistematizado cuando cada cosa tiene su lugar), es una garantía de la eficiencia, especialmente si ya llegó la hora de acelerar el paso. No podrás cambiar de velocidad si tu escritorio o tu casa son todo un caos.
Fuente Autora, Olesya Novikova