Nadie es perfecto y créenos, estamos lejos de serlo, todos estamos repletos de defectos y pasamos por momentos en los que en realidad somos complicados de aguantar hasta para las personas que más nos aman. Por otro lado, hay rasgos personales que pueden resultar contraproducentes para las relaciones interpersonales que van más allá de una serie de momentos concretos.
El problema tiene dos realidades: Las personas cambian constantemente y no terminamos de conocer nunca a las personas. Un hombre puede resultar demasiado encantador al principio, pero luego puedes preguntarte qué sucedió con ese príncipe azul. O por el contrario: alguien puede parecerte demasiado aburrido y luego puedes sentirte atraída hacia él.
Lo que sí es verdad es que algunas personas tienen una manera de relacionarse con su afectividad y con la de los demás bastante desadaptada. Tal vez no saben amar o no les gusta ser amados. En estas ocasiones, al menos de que suceda un milagro, la relación va a terminar con resentimiento y odio. Por ello, te mostraremos a continuación tres tipos de hombres los cuales deberías mantener muy alejados de ti.
-
Los hombres que van de un extremo a otro
Son esos hombres que pasan de la mayor ternura a la agresividad extrema, en varias ocasiones sin que hayas hecho algo que lo amerite. Nunca hay una explicación lógica de porqué sucede. Sencillamente, un día se muere de amor por ti y te llena de cumplidos y cariños pero al siguiente día te rechaza cruelmente.
Suelen ser bastante impulsivos, sin saber cómo, empiezas a experimentar una profunda ambigüedad frente a ellos. Te sientes genial cuando están en su mejor faceta, pero cuando está en la etapa oscura, no quieres estar ni un centímetro cerca porque sabes que lo que viene son truenos, rayos y centellas.
Este tipo de hombres te agotan emocionalmente. Tienen evidentemente un problema con ellos mismos y los transmiten con sus parejas, suelen ser muy egocéntricos y por eso no tienen en cuenta los efectos que sus palabras o acciones causan en ti.
-
Los hombres que mienten
Hay infinitas formas de mentir, la más evidente es hablar acerca de hechos que jamás pasaron. Pero vivir en función de aparentar ser algo o alguien que no eres, prometer y no cumplir, también son maneras de incurrir en la falsedad.
Pero las mentiras siempre tienen patas cortas y el mentiroso se puede delatar, no por la manera en que te miente, sino por cómo lo hace con los demás, si lo hace con otros es evidente que puede hacerlo contigo, ahí es cuando tienes que siempre estar pendiente de lo que le dice a los demás y pensar en que puede llegar a decirte cosas que no son reales.
Una persona que siempre viva mintiendo puede afectar en una relación en cuanto a la confianza y todos sabemos que esa es la base para que una pareja siga adelante, porque sin confianza, no hay nada.
-
Los hombres que te intimidan
Son esos hombres con los que sientes que estás pisando cáscaras de huevos. Suelen criticar absolutamente todo lo que haces o dices, incluso la forma en la que te vistes. Este aspecto es propio de las personas que tienen demasiado éxito y pueden comportarse como quieren.
La verdad es que con esta clase de hombres siempre vas a sentirte evaluada en todo lo que hagas y vivir en una relación sin saber qué estás haciendo bien o no, no es vivir. Lo mejor es que huyas de esta clase de personas porque lo que hacen es restarle cosas buenas a tu vida.