Los amigos son un regalo de la vida que en muchos momentos comienzan en la infancia. Es muy posible que en la etapa adulta sigas muy unidos con algunos de ellos. Te brindamos los cuatro recuerdos más frecuentes que tienes de ellos.
Los cumpleaños del sábado por la tarde
Estos momentos eran más que especiales. Cuando alguien de la escuela cumplía años y entonces tenías que asistir a la reunión para disfrutar de una deliciosa merienda y juegos hasta el final de la tarde.
Cumpleaños con los que romper la rutina y disfrutar del paso del tiempo en un momento en el que, el paso de los meses se vive de un modo muy diferente.
Las excursiones del colegio
Siempre en la época de primavera hacíamos excursiones, eran la excusa perfecta para romper la rutina de las clases presenciales. Adquiríamos nuevos conocimientos a través de una experiencia que deja muchas emociones agradables en el corazón.
Seguro que hoy en día recuerdas algún lugar que conociste en una de esas excursiones de la que todavía tienes fotos guardadas.
Tu mejor amigo
Eran inseparables, no había nadie quien los separe. Todo lo vivían juntos, siempre apoyándose. Un amigo de la infancia con el que tenías una gran afinidad en el modo de ser. Teniendo todo en común, siempre les gustaban las mismas cosas, disfrutaban de las mismas emociones. Era a quien le contabas todo, hasta del jarrón que rompiste en casa y aún tu mamá no lo sabe.
Todo era más sencillo
Nosotros como adultos debemos aprender de ese yo infantil que un día fuimos. Por ejemplo, recordar lo fácil que era hacer amigos en clases, de perdonarnos por la mañana a uno de nuestros amigos. Y por la tarde, era como si no hubiese pasado nada gracias al juego como mejor terapia.
Hay momentos que la infancia brota de nuestras mentes como un espacio de nostalgia que nos recuerda un escenario cálido, amable de la amistad que alguna vez tuvimos o seguimos teniendo.