Existen muchas razones por la cual las parejas terminan una relación. Interfiere mucho las circunstancias que están viviendo, pero también puede ser forma de esa separación la madurez de la persona para terminar una relación. Puede ser que, en tu primera relación, como no tenías experiencia haya sido por una tontería, pero mientras vas avanzando y teniendo más aprendizaje sobre ese ámbito, las razones ya no son tan tontas que digamos.
Si bien los celos e infidelidad son los problemas más comunes, resulta curioso como los problemas van variando dependiendo de la edad:
Antes de los 18 años
En esta edad no hay madurez para poder enfrentar los problemas de una relación. Cómo aún soy muy jóvenes no hay un compromiso estable. No existen valores, ni sentimientos puros.
Entre los 18 y 25 años
A esta edad se vive una relación más intensa y en ocasiones los impulsos superan los sentimientos. Muchas veces actúan sin pensar, teniendo como consecuencia sus actos impulsivos. Se dejan llevar por la situación.
Entre 26 y 35 años
Uno de los miedos frecuentes que aparecen aquí es a la atadura, comienza aparecer el miedo al compromiso. Terminando separando una relación por este miedo. No quieren arriesgarse a estar con la persona equivocada. Haciendo que la llama del amor se vaya extinguiendo poco a poco.
Entre los 36 y 45 años
Los celos son más constantes en esta edad. Hostigando a la persona con sus celos enfermizos y provocando una separación. La falta de confianza o seguridad de los sentimientos hace que una tenga celos, provocando una separación.
Más de 45 años
A esta edad el desgaste parece ser la causa principal de las relaciones de pareja. Ya que pueden ser consumidos por la monotonía, el aburrimiento, falta de comunicación creando una distancia entre ellos y terminando la relación, sin dar más vuelta.