Habrán ya pasado un año y siento como si hubiera sido ayer el día que me dijiste para terminar. Porque ya no existía el amor entre nosotros. Fue la peor excusa que podías darme, porque yo aún siento amor por ti. Pero al parecer el amor se te había terminado a ti.
Me acuerdo que ese día no pude dormir, pensando en que me había equivocado. En que había fallado, comencé a preguntarme que tan mal hice las cosas contigo. No podía dejar de matarme con esos pensamientos. Ya que eso hacía que sienta cada vez más y más el dolor. No paraba para nada, mis lágrimas brotaban de mis ojos sin parar, queriendo retroceder el tiempo y poder resolver los problemas que teníamos. Pero ¿qué podía hacer ahora? No podía parar de preguntarme eso, que iba a hacer ahora de mí.
Sentía mil apuñaladas por todo mi cuerpo, no era sencillo poder levantarme y seguir como si nada. Los dolores eran profundos y mis pensamientos eran como una roca pesada que me hacía cargar por la espalda. No podía pensar en nada más, todo tan malo, todo tan miserable.
Estuve así hasta el día de hoy, sólo que hoy tengo más fortaleza gracias a mis amigos, a mi familia que ha estado apoyándome en esta transición tan pesada. Me han ayudado a poder salir adelante, me han levantado de poquito y dado fuerzas para poder ser la chica feliz que era anteriormente junto a él. Sólo que ahora ya no es con él, sino conmigo misma.
Me enseñaron mucho a valorarme, a salir adelante. Y aunque aún siento las punzadas puedo decir que estaré bien y que pronto se me pasará. Porque al fin sé que fui yo la que dio todo por esa relación. La que se arriesgó a que todo salga bien, di todo de mí. Y eso me contenta, eso me hace entrar en razón.
Él tampoco tiene la culpa, serán cosas que suceden. En un momento el amor se acaba o es que él no le tomaba tanto interés como yo. Pero bueno haya él con ese problema. Al menos yo sé que luche y logré sacar esa relación adelante en su momento. Y pues ahora toca dejarlo atrás.
No mentiré que aún lloro en las noches, aún los buenos recuerdos son como una herida para mí. Pero trato día a día poder dar un paso hacía mi bienestar para poder ser una persona fuerte e independiente. Que no dependa de nadie y solamente de mí.