Muchas veces hemos escuchado la excusa de que no hay tiempo para poder ver a uno, pero muchas veces es que eso sólo son excusas, ya que cuando uno quiere ver a esa persona el tiempo no existe. Aquí el tiempo no tiene nada que ver, si no es el interés que puedes tener para querer estar con esa persona o hacer algo.
Cuando realmente quiere ver a alguien, pues duerme menos tiempo, o duerme dos horas más tarde para poder llegar donde se encuentra esa persona que quieres ver, no importa que tan lejos esté de ti.
Es por ello, que cuando uno percibe una falta de interés duele mucho. Es normal que al pasar el tiempo comenzamos a tener más responsabilidades, horarios ajustados pero cuando uno quiere a alguien pues hace lo posible, sin poner ninguna excusa.
Por otro lado, no debemos insistir mucho en llamar a alguien ya que estás forzando las cosas, y eso si viene a ser una pérdida de tiempo. Porque estás con una persona que sólo está contigo porque no le queda de otra. Muchas veces cometemos el error de buscar sin dejar que nos encuentren, aún en contra de nuestra dignidad.
El amor es un sentimiento que necesita ser alimentado cada día para poder sentirnos vivo. Es ahí cuando nos damos cuenta de que nuestro deseo no es correspondido, nos invade el desánimo y la decepción, que nos hacen sentir pequeños y vulnerables.
No es para nada tarea fácil poder recuperarse de esa falta de afecto. Para poder juntar cada pedazo de nuestra autoestima se necesita mucho coraje y orgullo, y darnos cuenta de que es momento de comenzar a buscarnos, antes de buscar a alguien más.
Llegó el momento de tomar las riendas de nuestra vida, alejar a esas personas tóxicas y rodearnos de aquellas que son sinceras y dan ese amor incondicional sin obligarlos a nada. Estar con alguien que realmente vale la pena, y que no hay mejor momento que uno se pueda sentir vivo con ello.