“Fuiste esa luz que llegó sin avisar, sin yo haberlo buscado, de casualidad. Llegaste en el momento menos esperado y lo volviste un momento indicado, y llegaste para quedarte, para enseñarme que el amor verdadero nunca se retira así las personas si lo hagan, como nosotros dos”.
Cuando el verdadero amor nace y llega a nosotros, nos enseña que los amores no se planean, que no son como las películas ni mucho menos como los cuentos de princesas, no, son hasta mejores.
Nos enseña otro punto de vista al que teníamos antes, y nos demuestra que cuando es real, nunca se irá y será lo único que nos llevaremos a la tumba.
El amor real si existe, y se demuestra en todas las formas, hasta en los detalles más pequeños. De hecho, amar también significa que nos hayamos alejado por nuestro bien y para el bienestar de ambos, porque lo único que nos conecta, es ese amor que nació y criamos juntos.
El amor también es llorar, también es retirarse, molestarse, y hasta decepcionarse; ahí dejamos otra semilla de amor, otra semilla llena de recuerdos y de buenos momentos, pues nadie llora por algo que no sintamos ni nos afecte.
Pasará el tiempo y el amor nunca morirá, permanecerá ahí en un lugar, en un olor, en un recuerdo, en una lágrima, en una película, en un plato de comida, y hasta en una canción; y ahí es donde sonreiremos, recordando aquel amor que ya creció y puede cuidarse solo, no nos necesita, pero sin embargo, permanece ahí para no olvidarlo.
Este video va dedicado para ti, para ese amor que nunca murió, que siempre permaneció ahí y permanecerá hasta el último día de nuestras vidas.