Al comienzo del brote del virus, los medios mencionaban «tranquilos, el coronavirus solo mata a ancianos». Ese «tranquilos» no era para todos, ya que las personas que tienen ancianos en casa , les causaba un gran dolor.
El solo pensar que a tu ser querido pueda morir, aunque sea mayor, igual duele. Lastimosamente esta sociedad convierte a sus ancianos en piezas prescindibles.
Minimizan las muertes de los ancianos, aquellos que apartaron mucho a la sociedad y solo quieren algo de paz. Sin darles preferencias o la oportunidad de querer luchar por sus vidas, todo por esta sociedad insensible.
Aunque la ley de vida sea que a los mayores sean abandonados primero, no puedo sino estremecerme por esos ancianos a los que nadie tiene en cuenta.
Está más que claro que la muerte de niños y jóvenes conmueve. Pero eso, no nos da derecho a minimizar la pérdida de quienes han vivido más.
Solo queda esperar que todo esto pase y ya se dejen de perder tantas vidas. Que solo nos arrastra a tristeza y pánico, teniendo en la cabeza que en cualquier momento alguien de tu familia puede morir.