No solo se lastima con las palabras, sino también cuando nos ignoran, nos mienten, engañan, ofenden, humillar, esto suele ser más frecuente en las relaciones insanas.
Las relaciones sanas de pareja deben basarse en la solidaridad, en el respeto, la amistad, la complicidad. Caso contrario, se debe evitar la generación de relaciones basadas en el control, el miedo, la sumisión de cualquiera de las partes, por lo que es necesario estar muy alerta si eso se está dando en la relación.
Cuando sientas que tu relación esta pasando por estas situaciones es necesario ver con lupa y tomar medidas a tiempo, porque si no estamos atentos podemos estar envueltos en una relación altamente tóxica que acabe con la dignidad, seguridad, motivación de cualquiera de las partes.
Las relaciones basadas en el control, por lo general son procuradas por personas que han pertenecido a familias en las cuales el amor no era una bandera, sino que el amor había que ganárselo, que requería un esfuerzo y estaba condicionado y en donde en muchos casos existió la represión y maltrato físico, adicional al emocional. De este tipo de influencias resultan personas que no saben amar y con muchas carencias tanto afectivas como de recursos para manejar sus emociones.
La verdad es que todos somos capaces de querer mucho a alguien, de amarlo, pero si lo que nos ofrece está cargado de maltrato, nos lastima, pues podemos hacer algunos intentos por ayudarle si vemos un potencial claro, no imaginario ni idealista en que las cosas puedan resultar de otra manera, cuando existe una real disposición de cambio, pero ante siquiera la duda, lo más sabio es reconocer que esa persona no nos merece, que nosotros tenemos un valor que alguien más seguramente esté dispuesto a apreciar y que como opción siempre podremos optar por una soledad digna en lugar de una compañía que nos genere sufrimientos.
Fuente: Mujer