Cuando lo conocí, me enamoré inmediatamente de él. Me convencí de que era el hombre de mi vida y no hice más que entregarle mi amor de forma desmedida, sin freno. De veras creí que estaríamos juntos para siempre y no existiría ningún freno para nuestro amor. Dí todo de mí para que así fuese pero, desafortunadamente, él tenía otros planes respecto a mí.
Repentinamente, un día me dijo que no me amaba y nunca lo hizo realmente, me confesó que solamente me buscó para satisfacer sus deseos de contacto íntimo. Me dijo también que estaba casado y con hijos, y yo me estaba convirtiendo en un obstáculo para su familia. Sin más preámbulos, se alejó y me dejó ahí tirada, devastada, sin esperanzas acerca del porvenir. Lo había perdido todo, pensé que no tenía esperanza, hasta que descubrí que la capacidad para recuperarme estaba dentro de mí y debía ejercitarla.
A continuación, compartiré contigo toda mi vivencia y cómo hice para salir adelante luego de mi ruptura emocional.
Hay que proponérselo
Si no estás decidida a olvidar a ese hombre, por más que lo intentes pues no sucederá. En mi caso estuve dándole vueltas por dos meses hasta que finalmente me convencí de que debía dejarlo atrás como fuese. En ese instante todo fue posible.
Evita verle hasta que le superes
Eso implica dejar de tener contacto por redes sociales, mensajes de texto, llamadas, etc.; la idea es romper toda clase de vínculo con esta persona. Yo intenté contactarlo y esto no hizo más que empeorar mi estado emocional.
Disfruta tu soledad y conócete
Fue muy complicado para mí luego de estar tanto tiempo juntos. De repente, me dí cuenta que -por mi empeño de darle todo mi tiempo disponible- había abandonado a mis amigos y a otras personas que me importaban, así que lo primero que hice fue retomar mi círculo social. Igualmente, entendí que me conocía poco, así que aproveché el tiempo libre para practicar nuevos hobbies que siempre quise hacer y no había intentado jamás.
Vive el duelo y conoce a alguien más
No todo es color de rosa: viví muchísimos momentos de llanto profundo y depresión. Incluso, estuve al borde de echarme en una cama para siempre, pero con el apoyo de un profesional de la salud mental decidí vivir mi duelo hasta que estuve en condiciones de recuperarme y conocer a alguien más. Actualmente estoy profundamente enamorada de un nuevo hombre que conocí, bueno y maravilloso y totalmente distinto al anterior. Así que no pierdas la esperanza, amiga mía. Si yo pude recuperarme pues tú también.