Sabias desde un principio que mi cariño por ti siempre fue amical, pero me dijiste que el tiempo lo iba a solucionar todo y que iba a quererte tanto como tú me quieres a mí. Pues ha pasado varios meses y mi sentimiento por ti aún sigue siendo el mismo. Ni siquiera he sentido que mi cariño por ti ha crecido, todo lo contrario, a disminuido por motivo que ahora todo lo siento forzado.
A tu lado siempre la paso bien, pero cuando me besas y quieres seguir avanzando me siento incómoda, como si estuviera haciendo algo que no quiero. Se siente extraño cuando me tomas de la mano, no quiero que me digas que me quieres mucho y que estás feliz de estar conmigo porque yo no lo estoy. Siento que todo esto ha sido muy forzado y pues, no puedo aguantar más. No quiero lastimarte, pero mi cariño por ti ha disminuido que ni un amigo te considero, al contrario, ahora para mí eres una persona que no quiero ver nunca en mi vida. Sé que suena muy duro, pero sé que será lo mejor para nosotros.
Ya no quiero seguir ilusionándote y darte esperanza que en algún momento voy a sentir algo por ti. Durante 6 meses he vivido engañándote que te quiero como tú a mí. Por mucho tiempo he soportado tu amor, ahora por favor te pido que me dejes irme. No me guardes rencor por ser sincera contigo, no quiero que me odies. Te juro que lo intenté, me esforcé por sentir amor por ti, pero si no te quise en un inicio menos lo he hecho ahora.

Muchas personas aceptamos estar con alguien que no queremos mucho, porque pensamos al estar con esa persona el amor crecerá y será mutuo. Algo que sí ha pasado en otras relaciones, han iniciado con muy poco cariño y se ha transformado en el amor de sus vidas. Desgraciadamente, para todos no es igual. De repente al conocer a esa persona descubrimos que ni siquiera como amigo lo queremos.
Es una situación muy triste, pero si uno se siente mal con esa persona es mejor tomar la iniciativa de romper, porque no puedes vivir en una situación donde eres infeliz y a la larga lo hará infeliz a esa persona, porque está viviendo en una fantasía que en algún momento tendrá que despertarse y eso será muy doloroso.