Típicamente, en nuestra cultura se suele asociar el llanto como un signo de debilidad frente al otro. Pareciera como si derramar algunas lágrimas fuera algo totalmente alejado a nuestra humanidad, ¡Nada más absurdo que eso!
El llanto no sólo sirve para expresarnos cuando nos sentimos sumamente tristes o deprimidos por algo o por alguien; también es una manera de expresar felicidad o alegría, por lo que está asociado a un bienestar del cuerpo y la mente.
La verdad es que por llorar no nos hacemos más débiles frente a los demás. Simplemente significa que nuestro cuerpo ha desarrollado otra forma de expresar sus emociones. A continuación, te traigo los beneficios de llorar con frecuencia:
- #1 Llorar tiene un efecto relajante.
¿Te ha pasado alguna vez que, luego de llorar profundamente por ese viejo amor o la pérdida de un ser querido, te sientes con mayor tranquilidad de la que tenías antes? Llorar te ayuda a liberar tensiones emocionales y eso hace que te sientas más desahogado luego de conectarte con lo que sientes.
- #2 Llorar alivia el humor de las personas.
Según investigaciones científicas acerca del efecto del llanto en las personas, se ha comprobado que las lágrimas liberan dos hormonas importantísimas para mejorar nuestro ánimo: las endorfinas y la oxitocina. Estas hormonas son las responsables de que puedas recuperar tu alegría luego de llorar por largo rato.
- #3 Llorar te hace más empático con los demás.
Cuando observamos a alguien más llorar o somos nosotros mismos los que lloramos, puede invadirnos un sentimiento de empatía total por el sufrimiento que esa persona está sobrellevando en este momento, lo cual es bastante positivo.