Del amor y su magia mucho se ha escrito. Soñamos a veces con un amor que llegue y avasalle todo. Incluso nos permitimos soñar con el amor como en los cuentos de hadas, sin embargo en cuestiones del amor nunca se sabe.
El amor a primera vista existe y llega de manera inesperada como siempre nos acostumbra Cupido, pero también está el amor de poco a poco, el que día a día se agranda, se alimenta. El amor que va creciendo detalle a detalle, guardando la compostura que le regala el tiempo.
Nos sentimos dichosas sintiéndonos amadas, respetadas y anheladas. El juego de amar nos hace soñar, suspirar y ver las cosas desde un punto de vista mas positivo. Nos llenamos de gracia, de un estado que todo es maravilloso.
“Ámame todos los días como si fuese la primera vez…es quizá la regla para enamorarnos más, para disfrutar del amor y su encanto diariamente”.
Son esos detalles que vienen de manera inesperada, las miradas cómplices, la sonrisa nerviosa, aquella flor que tanto te gusta o esa comida que tanto anhelabas… Todo es válido para hacer crecer el amor y enamorar todos los días a la misma persona.
“Te regalo mi corazón cada día, es tuyo si así lo quieres, enamórame pues con tu esencia y regálame tu sonrisa”.
Te dejo este pequeño detalle, para que siempre te enamores.
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