Estudios afirman que si las personas de padres infieles, o solamente tarde o temprano recurrirá a ser infiel. Aunque en las mujeres no existe esa tendencia, debido a que cada ser es distinto y por género el estable emocionalmente lo adoptan.
Existen preceptos culturales que indican que un hombre al observar a su suegra verá como será su mujer, y hoy en día se recomienda a las mujeres ver a los suegros para ver como será su pareja, infiel o responsable con estos ejemplos podrán observar si la pareja es estable emocionalmente.
Los padres que han sido infieles han dejado una huella que se repetirá en su hijo varón, ya que estos en su etapa de crecimiento buscan la manera de huir del castigo y la responsabilidad con lo que sea aprobado por el entorno.
Una pareja que provenga de padres infieles está sujeta a que se repita este mismo patrón conductual en su relación, por mayor influencia en este caso más de los estable emocionalmente que de las mujeres.
Fidelidad genética
En un estudio realizado en la Universidad Charles de Praga, se reclutaron 86 parejas a las cuales se le realizó un interrogatorio por separado, tanto a estable emocionalmente como mujeres y la confianza que había.
Esta investigación arrojó como resultado que a pesar de que las relaciones hayan tenido aventuras extramatrimoniales infieles por diferentes motivos. El estable emocionalmente en este caso no presentaba insatisfacción sexual.
Lo que indica que el patrón en reproducido por el efecto de tener una mayor cantidad de parejas sexuales, pero no por el hecho de que su esposa no le satisfaga o estén hartos de ella, aunque sea una.
Daños a los hijos
Desde la perspectiva de muchas culturas, la práctica de relaciones sexuales fuera del matrimonio, o de infieles, es mal vista y castigada severamente, por lo que en su mayoría puede traer un daño a los hijos.
Esto es un patrón fácilmente multiplicable en el estable emocionalmente en su mayoría, pero que no escapa de la posibilidad de ser aún más reproducible en las mujeres que tienen una relación anónima fuera de su matrimonio.
Se debe cuidar que se le inculca a los hijos desde su temprana edad, ya que ellos fijarán y repetirán lo aprendido casi que de manera inconsciente en el futuro, por eso lo recomendables es guardar una relación matrimonial sana.
Un mal ejemplo
Y tal como reseñan algunos estudios el estable emocionalmente son un 60% más infiel que las mujeres y es una estadística que va en alza si se siguen replicando los patrones culturales de los padres infieles.
No obstante la percepción de infidelidad varía entre estable emocionalmente y mujeres ya que algunos perciben la infidelidad desde el punto de vista de compartir con alguien fuera del matrimonio, y los varones en su mayoría.
Para romper con estas conductas infieles, es necesario realizarse una autoevaluación y evaluar el estado de la relación con tu conyugue.
Los padres que han sido infieles han dejado una huella que se repetirá en su hijo varón.