Comencemos con un ejercicio. Elijamos tres elementos: tu amor platónico [que viene a ser tu actor o cantante favorito], un escenario [una playa paradisiaca o cualquier lugar que te guste] y el primer verbo sucio que se te venga a la cabeza. Ahora con esos tres elementos escribe una breve historia o lo primero que pasó por tu mente al elegir estas tres cosas.
Lo que acabas de hacer, es una parte de la fantasía sexual que tienes con alguien que te atrae. La mente produce ideas, imágenes o sentimientos que provocan emoción y excitación, generalmente son algo sexual. Relacionándose las fantasías sexuales con el placer y el deseo.
Es indispensable que un ser humano tenga estas fantasías en la intimidad, ya que eso hace que el placer sea mayor y lo convierta en un momento memorable. Existen varios mitos sobre las fantasías sexuales. Principalmente, es que las mujeres no somos iguales que los hombres, ya que en nuestro caso se apodera más lo sentimientos de culpa. Muchas mujeres creen que tener fantasías, sobre todo cuando estas con un conocido, es similar a ser infiel. Debes de quitar esa idea errónea de tu cabeza, pues nada está más lejos de la realidad. Las fantasías nos ayudan a tener un momento más placentero, su objetivo es emocionar más el ambiente.
Las fantasías íntimas femeninas más recurrentes:
Para muchas mujeres su gran fantasía es dominar al hombre. Tener momentos donde la mujer sea la que domine el momento, como rasguñarlo, golpearlo, someterlo, incluso utilizarlo como juguete sexual. Quieren tener el control de la situación, eso hace que los deseas lleguen al máximo.
Algo que también los encienden son los tríos, ya que estos son un sueño hecho realidad. Donde pueden estar incluidos dos hombres con una mujer o dos mujeres con un hombre, la imaginación queda a tu criterio. También dejamos bien en claro que esto no implica que seas homosexual, sólo es parte del juego que se tiene, es querer experimentar de todo y eso no está nada mal. Recuerda que las fantasías no tienen límite.
Puedes también seducir a esa persona a través del baile y movimientos suaves que puede dar a lugar a una intimidad más placentera llena de emoción. Cómo podrás darte cuenta, las fantasías también nos ayudan a reforzar nuestra autoestima y a analizar qué cosas nos gustan o nos gustaría probar.
Para terminar, a ambos sexos les gusta tener fantasías en lugares públicos, ya que esto les ayuda a aumentar la adrenalina a transformar en un momento lleno de peligro. Y pues a quien no le gusta sentir ese cosquilleo que produce la excitación de hacer algo arriesgado.