Que puedo decir de esto. No me queda nada más que decir de esta relación. Que fue casi perfecta, que fue uno de los mejores cuentos de hadas. Vivimos lo mejor de nuestras vidas. Ninguno de los dos nos arrepentimos de todo lo gozado, de todos los momentos compartidos.
Pero llego el momento de tomar nuestro propio camino. Nuestros planes no coincidían mucho, teníamos que sacrificar nuestros sueños para estar juntos. Y esa no es la idea, nunca fue nuestra idea, que sólo uno sacrifique por el otro. No estábamos dispuestos a soportar eso. No queríamos arrepentimientos en el futuro.
Queremos ser felices juntos pero también queremos ser felices con nosotros mismos. Y ahí había una contradicción, no concordaban para nada. Nuestros caminos se separaban a lo largo del camino. Así que tomamos la decisión a tiempo antes que se haga más doloroso, antes que se haga más amargo y no se pueda digerir.
Quiero que sepas que fuiste la etapa más linda de mi vida, siempre enfrentando todo problema. Saliendo adelante con nuestras fortalezas. Siempre buscando el lado positivo de las cosas. Viendo la manera de ser felices juntos. Fue increíble y sé que sientes lo mismo porque me lo dijiste antes de irte, antes de decirnos adiós.
Aún no pierdo la esperanza de poder encontrarnos en el futuro, de que nuestros caminos se vuelvan a cruzar y poder amarnos como aún lo seguimos haciendo. No quiero volar tanto pero quiero creer que esto puede pasar. Y si no igual, sabes qué fue lo mejor que vivimos.
Nunca me arrepiento de nada, nunca lo haré y siempre lo recordaré como la mejor etapa de mi vida. Espero que también tú. Que todo vaya bien en tu vida y que encuentres lo que buscas porque yo haré lo mismo. Que nuestros sueños se cumpla. Has que valga la pena todo lo que hagas de ahora en adelante.