La principal causa del deterioro de algunas relaciones, se debe a las falsas expectativas. Las falsas expectativas de los hombres con respecto a su relación, suelen ser incluso, más grandes y dañinas que aquellas que nacen de la mujer.
El hombre es dramático por naturaleza, a pesar de que existe una creencia que dicta que, la mujer, es alguien soñadora y suele ser quien se crea dramas en la mente.
El dramatismo del hombre es oculto, porque para ellos, serlo, es sinónimo de debilidad. Tontos constructos sociales ¿No?
A causa de esta represión social sobre el dramatismo del hombre, su mente se esfuerza aún más para crear expectativas, novelas y cosas fantasiosas para suplir esa necesidad de dramatizar su vida.
Por otra parte, el punto más débil de un hombre es una mujer. Una mujer es capas de crear las peores falsas expectativas de los hombres con solo una sonrisa.
El hombre comienza a interpretar la amabilidad como coqueteo y un toque en el brazo como un llamado a que le acompañe en la cama.
Entonces. ¿Cuáles son las falsas expectativas de los hombres con respecto a su relación?
- Su pareja siempre estará a la orden:
Como si se tratase de una esclava, no adrede, el hombre siente la posesividad sobre ella. Como si ella estuviese al servicio las 24 horas del día.
La mujer, en esa falsa expectativa del hombre, pierde el tiempo para sí misma, para dárselo solo a él.
Ilusiones, son solo eso. Porque, una mujer de verdad, sabrá que nunca podrá decirle que no a su tiempo a solas, a su momento con amigas y su yo interno.
- Encuentros íntimos siempre.
Al inicio de la relación, la más común de las falsas expectativas de los hombres, es que cree que la mujer siempre querrá compartir la cama.
Habrá suerte si ambos se aman con la misma intensidad, pero, eventualmente, uno se desenamorará más rápido. Si es la mujer, el hombre todavía creerá que ella siempre tendrá tiempo para jugueteos en la cama.
Se olvida que ella tiene la potestad para decir que NO y se empiezan a generar grandes conflictos con relación a este tema.
- Armonía perfecta entre familiares, amigos y su relación.
Finalmente, la más habitual de las falsas expectativas de los hombres cuando la relación es seria, es que su mujer tendrá una gran relación con su propia familia y amigos y viceversa.
De hecho, esto casi nunca sucede. La pareja no suele compenetrarse a tal nivel y son raros los casos en los que sucede.
Esta falsa expectativa nace de las ganas de unificar familias que, por décadas, ha invadido la mente.
De hecho, si analizamos el pasado, las familias en las épocas feudales, se unían por matrimonio con el fin de unir familias.
Este pensamiento aún cala, de manera leve y como falsa expectativa, en la mente de muchos hombres.
