La mente de los mentirosos patológicamente está comprobado que son personas que falsean la realidad como medida de escape, para poder resaltar y tener un poco de atención e incluso admiración, los mitómanos se cierra en hueco vicioso que les acaba dejando solos en el laberinto de sus mentiras.
Podemos observar cuando una persona es un mitómano por algunos síntomas que ellos presentan y manifestaciones en su conducta, en el transcurso de nuestra vida nos topamos con personas que fingen todo el tiempo ocultando las verdades de las cosas.
Cuando una persona dice pocas mentiras es normal porque hay que ser claro, que persona en el mundo no miente, pero cuando la persona dice mentiras ¡constantemente la podemos catalogar como mitómano
El mitómano siempre pensara de manera astuta para no ser descubierto, ya que él sabe que si se entera de si condición no lo tomaran nunca en serio causando que las personas se alejen de él.
- El círculo vicioso de la mentira
Usan las mentiras para ocultar las cosas, estas surgen demanera muy espontaneas, como una manera de evitar un serio castigo o un cumplimiento muy importante.
Este tipo de persona adquieren un beneficio inmediatos por cada vez que mienten al provocar tantas mentiras pueden ser el detonante de un refuerzo para repetir dichas conductas; al observarse que cuanto más se repite menos tareas debe cumplir.
Existe muy poca diferencia entre una conducta que esta buscando su beneficio de inmediato y una conducta adictiva, este tipo de conducta se da por la serie de repeticiones de mentiras pero sobre todo por la sensación de impunidad que deja a quién miente.
La mente de un mitómano se transforma en gran adición por lo que hace, aunque el quiera no puede dejar de decir mentiras se ha convertido en una parte de su forma de comportarse y relacionarse con las personas
Todos estamos expuesto a que nos toque en la vida un mitómano se puede tratar lo único es no prestarle mucha atención en lo que dice para no caer en sus juegos y en sus mentiras.
La situación que puede originar un comportamiento mitómano suele estar relacionada con el estrés.
Cuando la persona se encuentre en un momento comprometido y piense en recurrir a la mentira como una salida fácil a dicha tensión; precisamente esa liberación que va a sentir cuando salva la situación con la mentira va a ser el motivo para que se vuelva a repetir en otras ocasiones.
No existe un patrón sobre donde será la primera vez, ni cómo se mantendrá, pero si es cierto que si la persona se encuentra en una ambiente donde dicha conducta es normal, aceptada o justificada será mas fácil que se repita, por ejemplo, en el grupo de amigos, donde puede hasta que sea tomado como una gracia las continuas mentiras de uno de sus miembros.