Debemos dejar de preocuparnos de lo que fue y lo que será, debemos concentrarnos en vivir más nuestro presente, lo que estamos viviendo ahora. De disfrutar la belleza del ahora y poder gozar de eso para realmente darle un sentido a la vida. Si hemos cometido errores en el pasado, no debemos de perjudicarnos, aprendamos de ello y no volvamos a cometer en nuestro presente. No hagamos que eso repercute en nuestro presente y nos boicoteen nuestro presente.
En una relación de pareja tenemos muchas oportunidades de tomar decisiones, elegir, recorrer camino y ser sensatos, debemos pensar en lo que queremos hacer, solos o con nuestra pareja, sea cual sea nuestro plan, estamos constantemente expuesto a errores. Sin embargo, hay errores que pueden marcarnos, ya sea por el mal que ocasionó o que ocasionamos, el caso de ello es que cuando la equivocación partió de nuestra parte, es mucho más dolorosa, atormentándonos con lo sucedido.
Atormentarse no enmendará el error
No vale la pena torturarte por algo que ya paso y no podrás corregir. Pero lo que puedes hacer es no volver a cometerlo, aprende de esa lección que te dio la vida. Hazte responsable de tus acciones y asúmelo como todo valiente. Si te equivocaste y eso pasa porque eres un ser humano que se equivoca como todos, pero no sé cómo todos y aprende de ellos para no volver a pasar por eso una vez más. Por un error no tiene sentido que destruyas todo lo bueno que has vivido hasta el día de hoy.
Así que enfrentar tu error, convérsalo y asúmelo, no te atormentes, saca el recuerdo de tu mente y mantente alerta a lo que vives, sin que sea el pasado tu motivación diaria.
Reconocer los errores es de valientes
Eres una persona capaz que puede enfrentar todo lo que le pasa en la vida y los errores que también sean uno de ellos. Enfréntalos como persona responsable y asume que te equivocaste pero que no lo volverás a ser. No es fácil, por un teme de orgullo, ego o negación, siempre resulta difícil poder ser valiente y enfrentar esa realidad. No dejes que eso te nuble la vista, entiende bien lo que ha pasado y aprende de esa lección. No culpes a los demás cuando tú eres el responsable.