Puede que el amor sea algo simple, pero también es algo muy complejo. Puede hacernos la persona más feliz, pero indudablemente, también puede hacernos sufrir mucho. Habiendo relaciones que sean pocos saludables y nos causen daños, decepciones y dolor que alegría y satisfacción. Sin embargo, existen razones que nosotros ni sabemos, nos aferramos en mantenerla. Empeñándonos una y otra vez en volver a intentarlo, nos agarramos de palabras y actitudes que no tienen nada que ver con la realidad, mucho menos, con esa persona que amamos. Terminando muy perdidos y confundidos en lo irreal, una sensación entre el amor que desearíamos tener y realmente no tenemos ni idea de que hacer.
No hay nada de malo querer a alguien con todo el corazón y luchar por ese amor. Lo que no está bien es aferrarnos a alguien que no nos hace bien, que debes de hacernos ver el amor, sentir el amor nos da a conocer el dolor. Puede que en un momento esa persona sí nos amaba, pero algo pasó en el camino, en algún momento ese hilo que nos guiaba se rompió, se escapó la magia. Y eso no lo hace una mala persona, ni culpable. Simplemente el amor ya no existe.
Por otra lado, hay personas que no valen la pena, mucho mejor nuestro amor y el tiempo, mayormente son personas que no llenan nuestra expectativas o viven mucho en el pasado que en el presente llenos de resentimientos por asuntos no resueltos. Existen también personas inseguras que necesitan una afirmación constante para sentir que son amados y comenzando de tratar de manipularte para sentirse seguro. Y sin dejar de mencionar las personas infieles, esas que no saben apreciar el amor y la confianza aunque los amen de verdad.
Es muy difícil dejar ir a alguien que has amado mucho, sobre todo, cuando se construyen ilusiones sobre algo que nunca fue. Pero tienes que ser fuerte y comprender que a veces, es mejor retirarse antes de sufrir más daño. Vales mucho como para quedarte a alguien que no te valora. Si no te ama de verdad, no tienes porque si hacerlo tú.
Nadie merece migajas del amor, menos sufrir por alguien que no te valora. Muchas veces tienes que experimentarlo para darte cuenta de ello, pero míralo como una lección de vida y una oportunidad para fortalecerte en el amor hacia ti misma.
No malgaste tu tiempo y tu vida insistiendo en una relación que no te lleva a nada, que no te hace crecer como persona, que no te complementa. No permitas que nadie borre la sonrisa que llevas en tu cara, porque ahora es el momento de vivir la vida, cada segundo, sin detenerte a pensar qué pasará después. Vive el presente y disfruta de los placeres que te ofrece la vida.