“Cada persona que pasa por nuestra vida es única. Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros. Habrá los que se llevarán mucho, pero no habrá de los que no nos dejarán nada. Esta es la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por casualidad” Jorge Luis Borges
La vida está llena de misterio y en el momento menos pensado es cuando aparece esa persona que tan sólo verlo unos segundos puedes sentir mil sentimientos a la vez.
Tenemos que ponernos a reflexionar sobre la naturaleza y riqueza de estos contactos. Ya sea un pequeño instante, como largas horas conversando, cada uno de estos encuentros, lleva consigo mucha riqueza y crecimiento si nos detenemos a observarlos.
Dos personas se encuentran, dos mundos se encuentran
No importa la manera en que se de esa situación, ya sea a través de la amistad, el amor o cualquier otro motivo, es algo complejo. Cada uno de nosotros somos un mundo, un misterio lleno de posibilidades, con experiencias pasadas, con proyectos futuros, con características personales y con sus miedos. Las relaciones que se tiene con los demás es siempre un misterio, un enigma.
Imagínense dos personas hablando sobre cualquier cosa, cada uno con sus propios pensamientos, con sus propias ideas, con sus defectos y virtudes. Es un choque de mundos que puede generar una conexión inmediata creando una cercanía con esta nueva persona llegando poco a poco a ser unidos e inseparables.
La importancia de las interacciones
Vivamos la interacción, y saquemos el jugo que está nos ofrece para avanzar en nuestro aprendizaje.
No es sólo preocuparnos qué hay de bueno o malo en el otro, sino de ver cómo nos afecta, y qué podemos extraer de todo ello hacia nosotros. Hay que sumergirnos en este encuentro y aprovechar para ir creciendo como persona social, dándonos cuenta de dónde erramos, cómo acertamos que enseñamos o nos enseñan, siendo capaces de apreciar la belleza de la interacción, la capacidad de compartir.
Lo importante de todo esto es disfrutar de estos placeres inesperados que la vida nos otorga, tenemos que tener la mente abierta para aprender y crecer como ser humano.