La esencia del ser humano siempre es pensar demasiado, sin embargo siempre llega un momento que te preguntas ¿Cómo dejar de pensar tanto? ¿Cómo dejar de preocuparnos?, pues no es fácil dejar de hacerlo porque parece que hubiera una fuerza que no nos deja detener los pensamientos que llenan nuestra cabeza de toda clase de imágenes y situaciones que ni siquiera han sucedido, todo ocasiona que nos estresemos y al final nos convirtamos en una bomba de tiempo que no sabemos en qué punto pueda llegar a estallar.Tenemos que reconocer que en la vida no tenemos el control de todo, hay que aprender a dejar ir lo que nos atasca, nos atormenta, nos lastima y que no podemos cambiar. No nos confundamos dejar ir algo o alguien no es lo mismo que renunciar a ello, y con mucha sensatez es algo que debemos tener en claro.
Vive el día a día con todas tus ganas, poco a poco, un problema a la vez en vez de intentar responder esa pregunta busca soluciones, enfócate en el aspecto positivo y si no puedes controlar alguna situación déjalo de ese modo, es la única manera de mantener tu mente en un estado saludable, sino te ahogaras en tus propios pensamientos, como dice el dicho: “No te preocupes, ocúpate”
Dile adiós a la culpa, es verdad que hay acciones que nos gustaría tener una máquina del tiempo volver al pasado y borrarlas de nuestras vidas , aunque sería genial y mágico que eso fuese posible hasta ahora no lo es y tenemos que aceptarlo. Basta de cargar con el fantasma de tu pasado en tu presente y mucho menos en tu futuro, suelta esa carga tan pesada que llevas en tus hombros llénate de valentía y perdónate, porque mereces una segunda y tercera oportunidad de intentarlo, de ser mejor persona y de hacer con tu vida lo que mejor te parezca.
Mantenernos preocupados no nos llevará a nada, lo mejor es liberarte de tensiones y haz lo que más te gusta, busca un hobbie que mantenga tu mente despejada y en calma, no te olvides de que más que por la compañía de otra persona es por tu salud física y mental.
Fuente: Mujer