“El amor no es esencialmente una relación con una persona específica; es una actitud, una orientación del carácter que determina el tipo de relación de una persona con el mundo como totalidad, no con un objeto amoroso”.
-Erich Fromm-
Erich Fromm, es reconocido por su obra más nombrada, “El arte de amar”. En ella se encuentran grandes revelaciones y aclaratorias sobre cómo trabaja el amor, de qué se trata y la manera correcta de interpretarlos y ejecutarlo. Una de las frases más impactantes del libro, define al amor como un acto que no necesariamente depende de otro para ponerse en práctica.
Erich demuestra que el amor, más que un sentimiento, es una actitud, un estado del ser humano en el que la persona intenta perfeccionarse y ser feliz. Sin embargo, este amor puede ser suficiente si nace desde adentro y se da hacia uno mismo.
La relación que tenemos con el mundo, puede ser de un eterno conflicto o de la búsqueda de la paz. Eso dependerá de la actitud que ya se comentó, la cual determina nuestra capacidad de amarnos y entregar amor al exterior, lo cual, repito, no es necesario que sea a una pareja.
“El amor es una actividad, no un efecto pasivo; es un estar continuado, no un súbito arranque”.
Por otra parte, Erich insiste en que el amor debe nutrirse a través de las acciones. No puede permanecer quieto, porque esto implica el deterioro y muerte del mismo. En otras palabras, todo lo que se mueve, está vivo, y mientras no movamos nuestra actitud de amar por medio de acciones, el amor permanecerá muerto.
“El amor es la preocupación activa por la vida y el crecimiento de lo que amamos”.
Por último, el autor de esta obra, plantea que amar no solo se basa en la entrega del ser, o en el reconocimiento de la propia dignidad. Erich considera que amar, es querer que aquello que amamos, crezca, evolucione y mejore, no por nosotros, sino por sí mismos. Porque amar es “Querer el bien del otro”, según Tomas de Aquino, un filósofo de la era medieval, que sirvió como inspiración para Erich.
Podemos definir entonces al amor como:
Es el estado de la persona en la cual busca mejorarse a sí mismo, así como desea que la persona amada, siempre tienda al bien. El amor es una actitud frente a la vida, en la cual, al almacenarse dentro, necesita compartirse, con parejas, amigos o familiares, pero, en definitiva, no puede morir dentro, porque en la soledad, este se deteriora.