Hay una diferencia importante entre la amistad y el amor romántico, pero algunos de los ingredientes presentes en una amistad también suelen estar en las relaciones amorosas, y viceversa. De allí que uno decida examinar las relaciones entre la amistad y el amor de pareja, para saber si una pareja también debería ser tú mejor amiga…
¿Cuáles son las diferencias entre amistad y amor?
Aunque todo el mundo tiene claro lo que siente para otra persona, y puede diferenciar sin problema si se trata de un interés romántico o de simple amistad, en realidad no es tan fácil diferenciar esas dos relaciones. Sin embargo, creo que los elementos siguientes son claros:
- Una relación amorosa suele ser exclusiva, mientras puedes tener varias amistades a la vez.
- La intensidad del sentimiento amoroso es mayor en una relación de pareja que en una amistad.
- Las relaciones íntimas, y su requisito, la atracción física mutua, diferencian la relación de pareja de la amistad.
- Una pareja tiene mayoritariamente planes en común, aunque cada uno respete el espacio del otro.
- La amistad suele centrarse principalmente en momentos de diversión, mientras la relación de pareja cubre prácticamente todos los momentos del día.
- Por lo general, las amistades se hacen a la larga, con un proceso de selección involuntario. Las personas pasan de simple conocidos a amigos cada vez más importantes a medida que se van compartiendo más momentos. Las parejas suelen basarse en una atracción inicial, que en poco tiempo acerca mucho a las dos personas, incluso cuando no se conocen prácticamente nada.
¿Debe tu pareja ser tu mejor amiga?
En mi opinión, es fundamental que entre las dos personas que componen una pareja exista una relación de amistad muy fuerte. Nunca me ha gustado el término “mejor amigo”, porque no creo que se puedan comparar a las personas y menos aún la calidad de la relación con esas personas, sin embargo, me parece lógico que por proximidad y conocimiento, a la larga la pareja se convierta en la amistad más importante de una persona.
Hago especialmente hincapié en uno de los puntos que mencionaba antes y que diferencia los amigos de las parejas: la diversión. Creo que un error de muchas parejas es olvidarse de este aspecto fundamental en una relación de amistad. La rutina y las obligaciones del día a día pueden ir ocupando mucho del tiempo en común, pero la diversión es algo que nunca se puede perder. ¿Te imaginas tener amigos con los cuales nunca quedas para hacer algo entretenido? No serían realmente amigos. Pues pasa lo mismo con la pareja, hay que cuidar la relación con una buena dosis de diversión.
Pero, cuidado. Tu pareja no debe ser tu única amiga. Necesitas tener a otras personas a tu alrededor, que te enriquecerán con la diversidad de sus personalidades.
Y claro, tu pareja es más que una amistad. Si la diversión es importante, el picante, la pasión, la atracción lo son también mucho, evidentemente.
¿Puede una amistad convertirse en pareja?
Hay múltiples ejemplos de amigos que acabaron enamorándose. No es lo más habitual, porque normalmente una vez que se establece una relación amistosa, se deja de percibir el componente sexual de la otra persona, de una forma un poco similar a lo que ocurre entre personas de una misma familia. Pero la amistad puede llegar a consolidarse tanto que los dos individuos den el paso. Normalmente, es cuando hay mucha complicidad, se comparten muchos intereses y objetivos, y hay mucha confianza.
Por lo tanto, la respuesta es sí, y es un tipo de relación amorosa que tiene muchas ventajas, ya que ambas personas se conocen muy bien y no se encuentran con las dificultades que tienen otros cuando abren los ojos después del enamoramiento.
Sin embargo, si estás leyendo este artículo porque te gusta un amigo o una amiga, también hay que ser sincero: es raro que este interés sea mutuo. Si os conocéis desde hace mucho y la otra persona no ha dejado ver nada de atracción, entonces lo más probable es que no esté interesada. Porque cuando dos personas quieren lo mismo y pasan mucho tiempo juntos, algo ocurre naturalmente.
Fuente: Bienestar