A veces, cuando andamos solteras y sin compromiso, recordamos lo bien que nos sentimos con aquel primer amor. Estar a solas en nuestra habitación sólo con nuestra almohada de compañía nos vulnera ante la posibilidad de retomar contacto con nuestro pasado, sin pensar claramente en las consecuencias.
Antes de lanzarnos a una aventura que nos puede dejar peor de lo que nos sentimos ya, es importante entender que el hecho de que vengan los recuerdos agradables a nuestra mente no significa que debamos revivirlos, y es que ninguna experiencia es idéntica a otra por más que tratemos de que sea así.
Pasa que algunas personas tardan más en sanar heridas que otras, pues cada quien tiene un ritmo particular que nadie conoce. Estar con alguien de manera sana implica reparar las heridas del pasado para poder abrirse genuinamente.
También puede ocurrir que tu ex te contacte y quiera volver a estar contigo, a revivir viejas glorias o a cerrar ciclos haciendo todo aquello que pudo ser. Si cedes ante tu petición, estás cayendo en el mismo círculo vicioso, así que recuerda en primer lugar por qué ya no están juntos y tendrás una idea más clara de por qué no debes volver.
Si quieres volver con él para abrazar a alguien de carne y hueso en vez de a un peluche, es claro que no debes entregarte a esa idea. Entiende que no es amor de verdad sino un apego que te puede traer grandes problemas.
Revísate muy bien para que encuentres esas formas de satisfacerte plenamente, sin implicar daño hacia ti o hacia otros. La soledad es algo de lo que no podemos huir por más que queramos, así que lo más inteligente es aprender a vivir con ella. De lo contrario, nos entregamos a alguien como si no existiésemos, como si no hubiesen más prospectos.
El camino hacia el amor propio puede verse como algo complejo al principio, pero cuando se hace un hábito ya no hay vuelta atrás. Por eso no debes dejar de preguntarte por qué quieres volver con él y si eso afecta negativamente el amor que has desarrollado hacia ti.
Aparte de ti, hay personas que están a tu alrededor y te tienen aprecio. Escucha y valora sus opiniones, pues pueden darte luz sobre asuntos que tal vez ahora son muy oscuros para ti.
No hay fórmula mágica para saber si una relación será o no para siempre o si volver con él hará que estés mejor o peor, pero sí hay una serie de pautas que te hacen más fácil tomar una decisión que sea la mejor para los dos, aunque principalmente para ti.