Cuando una personq ya no nos ama, no le importa lastimarnos. Sin embargo, la situación va más allá de eso, pues el problema de fondo es que estamos con una persona violenta.
Muchas personas creemos que la señal de que alguien no nos ama es el maltrato. “Si me ignora es porque ya no me ama”, “si me golpeó es porque ya no me quiere”, “si me engañó es porque ya me olvidó”.
Bajo las frases anteriores es más que obvio que si actúa de esa manera efectivamente es porque no nos ama. Aquí la diferencia es que no necesariamente todas las personas que dejan de amarnos van a lastimarnos.
Si alguien nos lastima es porque es una persona violenta, con cero inteligencia emocional, que no tiene ni idea de cómo hablar de lo que siente y por lo tanto agrede. No es una persona sana, es alguien que debe acudir con un terapeuta en salud mental de manera urgente.
Porque alguien que deja de amar, no tiene por qué herir con la intención de hacerlo. Cuando una persona sana deja de amar, simplemente lo reconoce, lo dice y en consideración a la relación de amor que una vez existió, respeta y se comunica de manera honesta.
Desafortunadamente, la mayoría de las personas no somos capaces de comportarnos como se describe anteriormente. Puesto que hemos sido educados en el drama del amor romántico y de las telenovelas llenas de traiciones y bofetadas. Eso es la cultura del amor romántico como sinónimo de la violencia y no debemos permitirlo.
Por otro lado, somos una generación que ya no tolera fácilmente los abusos y sabemos que amar tiene más que ver con disfrutar y compartir la vida que con sufrir. Así que, si una persona ya no nos ama, pero además nos maltrata, ¡es mejor que no nos ame! Nosotros solos podemos construir otro tipo de relaciones basadas en el respeto y no en la violencia.
Por lo tanto, consideremos esta lista de cosas que no deberiamos tolerar por amor y huyamos de esa relación que por más que queramos negarlo, es súper tóxica y al final saldremos muy lastimados. Recordemos que valemos mucho y no merecemos estar donde nos tratan mal.
Un estudio científico afirma que salir de una relación tóxica nos hará más inteligente, así que por nuestra salud mental, lo mejor es que nos pongamos por delante de cualquier relación que nos haga daño.