En la gran mayoría de las cosas no existe gran diferencia entre hombres y mujeres. Como miembros de la especie humana, compartimos valores como la amistad, la tolerancia, el respeto, el amor, entre otros. Del mismo modo, también compartimos antivalores como la ira, la rabia, el desprecio, el odio. En fin, compartimos la misma composición genética y nuestros cuerpos funcionan de la misma manera.
No obstante, cuando salen a tope los gustos de cada sexo, la realidad suele ser otra totalmente distinta. Ahí toman lugar las percepciones inherentes de cada género y la interpretación que le hacen. Así, por ejemplo, lo que para las mujeres puede ser sumamente agradable, para los hombres puede no serlo tanto. ¿Te llama la atención conocer más al respecto? Sigue leyendo las siguientes líneas para saber las cosas que a nosotros no nos gustan pero a ellas les encanta.
-
#1 Ir de compras.
Para cualquier mujer promedio, ir de compras es una experiencia sin precedentes que disfrutan totalmente. No importa si se trata de ropa costosa de marcas reconocidas o de artilugios de segunda mano, lo real es que les gusta muchísimo ir “de Shopping” y llegar a casa siempre con un artículo nuevo. En cambio, para nosotros eso suele ser una pérdida total de dinero y tiempo, por eso lo detestamos.
-
#2 Hablar demasiado.
La conversación es algo que solemos disfrutar casi todos los seres humanos. No obstante, es un hecho que las mujeres lo llevan a otro nivel. Díganme, caballeros, ¿Cuántas veces no se han sentido diezmados ante una mujer que no hace más que hablar y hablar sin detenerse? No me cabe la menor duda de que casi todas las respuestas serían afirmativas.
-
#3 La cursilería.
Es bonito ser romántico y detallista. Todos tenemos sentimientos y es normal enamorarse y vivirlo abiertamente, pero vamos… una cosa es la ternura y otra cosa es la monería descontrolada. Al principio puede ser tolerable, pero al tiempo resulta en una inmensa tortura para nosotros.