¿Alguna vez has besado a alguien que te haya hecho sentir esperanzada? Existen personas que con un beso te pueden hacer recobrar la esperanza en todo, en la vida, las costumbres perdidas, las ganas de amar y los sueños que parecían inalcanzables.
No lo sé, creo que algunas personas, tienen magia en su boca, y se les nota con las palabras, los besos y los silencios que dan. A esos sí que no hay que dejarles ir, porque entregan todo el universo en cada beso y te hacen darte cuenta de que no necesitas nada más para ser feliz.
Los labios con sabor a esperanza, son escasos, son memorables y tienen nombre. Todas tenemos a alguien a quien nos gustaría volver a besar una vez más, solo para revivir lo bellos segundos que otorgaba a través de sus bocas, esos segundos que parecían eternos y no queríamos que nunca se acabasen.
Y es que, con cada uno de estos besos, sentías que llovía café, apreciabas el perfume de su camisa con más detalle, imaginabas estar de pie sobre una nube y podías casi aletear con las alas que te salían por la espalda.
Esos besos mágicos, te hacían volar por sobre valles, lagos y montañas. Esos besos con sabor a esperanza, te hacían creer en el amor eterno y verdadero. Esos besos, nunca debemos dejarlos ir, porque con su despedida, se va la esperanza en los sueños y aspiraciones que una vez, se construyeron juntos.