Un gran problema en las relaciones, son aquellas personas que, sin superar a su pasado, comienzan a crear un nuevo futuro al lado de alguien. ¿Qué tiene de malo? Los pasados amorosos, cuando no se superan de la manera adecuada, bloquean el desenvolvimiento del individuo en la nueva relación, afectando la manera en que se muestran y entregan los sentimientos por el otro.
Tenemos la falsa creencia de que siempre “un clavo saca otro clavo”. La verdad es que la mayoría del tiempo, terminamos martillando encima del recuerdo, en vez de hacerlo por un costado, haciendo que nuestra ex pareja se profundice más en la memoria. Acá te van unos tips para que evites que ese pasado, afecte tu presente.
- Valora a tu presente: Ten el respeto no solo por ti, sino por el otro. Entrar a una relación sin haber superado tu pasado de manera correcta, es una falta de respeto a la dignidad de ambos. Estás entregando no solo tu cariño, sino también tus problemas, y eso se acepta, lo que no se acepta, es que entregues problemas que son consecuencia directa de una tercera persona. Así que, lo mejor, antes de empezar una nueva relación, es que superes tu pasado, parar que no afecte tu presente.
- No hay vuelta atrás: Si ya comenzaste la relación, y tienes fe en que ello te hará olvidar a tu ex, aférrate a eso. Quizás no sea lo más ético, por lo que mencioné anteriormente, pero si alguien se convence a si mismo de que puede superar el pasado, entonces lo hará. El mayor problema en las personas que no superan a sus ex, es que no aceptan la pérdida. No es un tema de resignación, porque si te resignas, admites que vivirás el resto de tu vida pensando en tu pasado. Ahora bien, si lo aceptas, estás admitiendo que eres lo suficientemente fuerte como para asimilar que el pasado ya no tiene retorno y que vivir en él, no te hará ningún bien, ni para ti, ni para tu pareja.
- Escribe una carta: No a tu ex, sino a ti misma. No escribas la carta para ti del ahora, sino para ti del pasado. La mayoría de la gente que no puede olvidar a sus ex, lo reconocen, pero también están conscientes de que eso afecta sus vidas. En la carta, aconséjate a ti, como si fueses tu mejor amiga. Regáñate y critícate, pero, sobre todo, tómatelo en serio. Usa toda la sabiduría que tengas para plasmar en la carta, los malos aspectos que pueden surgir en tu relación si no olvidas a tu ex. Guárdala, y léela cuando lo recuerdes.
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