Atraer a otra persona no implica que tengas que tener un cuerpo perfecto, el aspecto físico pasa a segundo plano cuando queremos atraer a alguien.
¿Nunca te ha pasado que te gusta un hombre y no sabes muy bien el motivo? El motivo es que hay una serie de aspectos que nos resultan agradables de esa persona y hacen que queramos tenerlo a nuestro lado.
Muéstrate segura de ti misma: el hecho de mostrar seguridad en una misma es un arma de seducción estupenda, tanto para hombres como para mujeres. Nos gusta ver esa actitud en los demás y nos resulta especialmente atractiva.
Sé tú misma: puede parecer un consejo demasiado usado, pero es realmente necesario en la seducción. No debemos fingir ser quienes no somos, lo que sí podemos hacer es mejorar ciertos aspectos, pero nunca fingir. Si actuamos y nos mostramos diferentes, tarde o temprano, saldrá nuestro yo real y si el hombre al que intentas seducir descubre a una persona diferente de la que se enamoró vuestra relación acabará fracasando.
Sonríe: muéstrate alegre y positiva, es una actitud tremendamente atractiva para los hombres y en general, a las personas nos gusta rodearnos de positivismo y nos gusta ver rostros iluminados por la felicidad.
Sé coqueta: ponte guapa, pero sin dejar de lado tu estilo personal. Puedes intentar sorprenderlo con un peinado nuevo, con unas ropas sugerentes y con un perfume con el que te sientas identificada (¡Cuidado con el perfume, no te bañes en él! Echa la cantidad justa).
Muéstrate misteriosa: déjale con la intriga, que quiera saber más. No le des siempre toda la información, debe ir conociéndote poco a poco y debes hacerle sentir el suficiente interés como para querer saber más sobre ti.
Haz que te eche de menos: no estés pendiente de él a cada momento, debéis pasar buenos momentos juntos y debes dejarle a su aire como para que le dé tiempo a echarte de menos. Imagina que estáis tomando algo en una cafetería y os lo estáis pasando genial, si en un momento dado le dices que te encantaría seguir con él, pero te ha escrito una amiga y que tienes que ir a ayudarla con algo, estás dándole a entender que, por un lado, tienes interés en él y te resulta agradable tu compañía y por otro harás que piense en ti y que te eche de menos cuando no estés. Además, será una buena excusa para pedirle otra cita, ya que esta no se completó como te hubiera gustado.
Mírale a los ojos: la mirada es un poderoso elemento de seducción, mírale a los ojos cuando hable contigo.
Conversación fluida: intenta tener siempre temas de conversación preparados para esos momentos en que hay que romper silencios incómodos. Ten en cuenta que no se trata de que hables siempre tú, no es un monólogo, debes dejarlo participar, de hecho, debes intentar que se involucre en la conversación, de este modo podrás hacer que se divierta y que disfrute de tu compañía.
Escúchale con atención: a todos nos gusta que nos presten atención cuando hablamos, al hombre que te gusta también. Préstale atención, olvídate de mirar el móvil cuando te está hablando. Además, es posible que obtengas información útil para seguir seduciéndolo.
Hazle cumplidos: el reconocimiento por otras personas nos hace sentir muy bien, hazle saber que estás atenta a sus logros y que los valoras. Felicítale por haber ganado ese partido de fútbol, por haber conseguido aprobar ese examen o dile lo guapo que está cuando se haya cortado el pelo.
Errores comunes
Los amigos son sagrados: no intentes poner celoso al hombre que te gusta tonteando con sus amigos, es un gran error. Puedes provocar peleas con su amigo o que pase de estar interesado en ti a dejar el camino libre a su amigo.
No hables de tu expareja: olvida el pasado, hablar de las exparejas sea en positivo o en negativo nunca es buena idea, además, puedes darle a entender que aún no has pasado página del todo.
No hables mal de nadie y evita comentarios negativos.
Sexy sí, pero sin pasarse: usar ropa muy provocativa puede causar el efecto contrario en el hombre que te gusta, está bien vestir algo sexy, pero si vamos exageradamente provocativas puede dar incluso una apariencia de que estamos desesperadas, quizá consigamos sexo esa noche, pero no lograrás enamorarlo así.