A veces creemos que enamorarnos implica depender emocionalmente de otra persona, obvio esto no lo percibimos de forma consciente, pero si lo asumimos de forma inconsciente.
Para hablar de libertad emocional en una pareja se podría decir que es un nivel elevado en el amor, pues en la mayoría de las parejas no hay libertad emocional, alcanzar esto, significa un alto nivel de madurez en la pareja.
¿Qué es libertad emo
cional? Es la capacidad que tiene una persona de amar a otra pero sin sentir necesidad. Es tener presente que tú eres un individuo diferente a tu pareja y que por lo tanto no son iguales.
Sentir libertad emocional es estar con tu pareja, sin prejuicios, siendo tú mismo siempre, no actuando para ser aceptado, sino para ser feliz.
Emoción generosa
Ser generoso emocionalmente es un acto genuino, pues quien lo hace, no tiene miedo al rechazo, ni al fracaso, sino que simplemente expresa tus sentimientos con libertad.
Es ser generoso con los sentimientos, mostrar y demostrar el amor que le tiene a la otra persona. Si en una pareja no existe libertad, no se puede hablar de amor, pues son dos valores que están intrínsecamente ligados.
La libertad nace de la comunicación en la pareja, pues cuando hablas dices lo que quieres y no lo que no, ahí estas expresando lo que piensas.
Debes aceptar de forma positiva el cariño que te da tu pareja por más mínimo que sea, una caricia, un beso, y debes agradecerlo. Pero también debes aprender a pedir de la mejor forma aquellos afectos que necesites sin sentirte vulnerable.
Para que una relación se mantenga durante mucho tiempo debe existir la libertad emocional, pues una persona no podría estar tanto tiempo al lado de otra persona, que la coacciona y no la deja ser libre.
Realmente si pueden existir parejas así, pero son relaciones toxicas que no terminan en nada bueno, sino lastimadas.
Trasmite un mensaje de libertad emocional
La verdadera libertad consiste en potenciar al otro para que sea el mismo y logre alcanzar todas sus metas, es ayudarlo a desarrollar sus habilidades y sacar a flote todo ese talento.
Se trata de no cambiar nuestra forma de ser, nuestra forma de pensar, pues muchas veces dejamos de hacer lo que nos gusta, los lugares que frecuentamos, las personas con las que queremos compartir por complacer a nuestra pareja.
Nuestra felicidad no depende de lo que haga o deje de hacer nuestra pareja, pues ella no debe ajustarse a nuestras expectativas, por el contrario la felicidad depende de nosotros mismos, de lo que hagamos o dejemos de hacer.
La idea es que nuestra pareja nos aporte riqueza y no que merme otros ámbitos de nuestra vida, también es importante que cada uno mantenga vitales sus intereses individuales, esto enriquecerá los momentos que compartan juntos.
Por estas razones es necesario que las personas aprendan a diferenciar entre amor y obsesión, así como también entiendan que amor no es control, que demos ser y dejar ser a la persona que amaos para que así se mantenga a nuestro lado.