Hoy en día no sabe cómo construir o desarrollar una relacione sana. El divorcio en la actualidad se ha vuelto algo bastante común: Rusia y Estados Unidos, aproximadamente el 40% de los individuos casados por primera vez se divorcian, mientras que el 60% de los que lo hacen por segunda vez y el 70% de los que lo llegan a casarse hasta tres veces también lo hacen. Para no agravar estos numero, ya es momento de que el ser humano aprende a solucionar los problemas de forma sabia y serena recurriendo a tips psicológicos. Por ejemplo, la Dra. Elizabeth Schmitz menciona que, a menudo, una discusión se puede apagar con un simple roce.
Todas son las 7 conductas que hace que tus discusiones no tenga sentido alguno, según los psicólogos.
“Patrones de conducta que hace que realices peleas con tu pareja sin ningún sentido alguno”
1. Ir a dormir enfadados:
Pensamos que ir nos a dormir con nuestra pareja luego de una pelea sin terminar puede ser algo malo, pero lo que no sabes es que esto es bueno en si. Los psicólogos mencionan que ir se a la cama luego de una pelea te dará tiempo de calmarte y pensar bien lo que dirás. De esta manera al momento de estar molesto evitaremos de decir cosas por las cuales luego nos podemos de arrepentir.
Así que ir se a dormir y resolver el problema al día siguiente, donde los estados de humor se encuentren en plena calma puede ser la mayor manera para solucionar un conflicto de pareja.
2. Buscar un leve roce con la mano:
Cuando estamos en plana pelea lo menos que queremos que esa persona nos toque, pero lo que no sabemos es que un leve roce de esa persona puede ocasionar un efecto calmante y hacerte recordar que lo más importante de todo es estar los dos unidos. Solo con un pequeño toque esto te dará o le dará a la otra persona un momento de calma y tranquilidad.
3. Renuncia a la palabra “debes”:
La palabra mas popular de una pareja es “debe” realizar algo para la otro persona, a primera instancia, podría parecer inofensiva porque todos comprendemos que la vida en común nos impone ciertas limitaciones. Pero en realidad “debes hacerlo tú” es una de las palabras más destructivas de todas las que se pueden mencionar en voz alta.
Sencillamente, compara cómo suenan estas dos frases: “Tienes que ayudarme en casa” y “Aprecio tu ayuda en casa, es difícil para mí sin ti”.
4. No inventar explicaciones hipotéticas de tu pareja
Examinar cada problema con una lupa y especular sobre hipotéticas razones y emociones de un ser querido hacia ti mismo, es muy elevada, pero esta aptitud es un sendero que no nos lleva a ningún lugar. Continuamente tememos que preguntar de manera sincera a nuestra pareja sobre aquellas cosas que le estaba causando preocupación y cómo ve el problema, qué pensamientos tiene y como se siente al respecto. Pero mucho más sencillo sería tomar la decisión de dar un paso e iniciar a elaborar preguntas de forma serena en vez de inventarse uno mismo su propia explicación sobre el comportamiento de tu pareja que, en la mayoría de los casos, suelen ser equivocadas.
Preguntarle a tu pareja sobre aquellas cosas que te preocupa seria una gran forma de ayuda para resolver muchos problemas en si, todavía en una etapa inicial, sin generar una situación no deseadas ni en caer en desacuerdos.
5. Recurrir al sentido del humor:
El humor puede ser la mejor forma para detener una discusión de pareja. Esto puede hacer que se calme un poco la situación, genera que tu cuerpo produzca la hormona de la felicidad, el cual hace que el cuerpo se tranquilice. De esta manera podemos evitar que las peleas continúen por un largo rato.
6. No tener miedo a entrar en la discusión:
Pocas veces hacemos el intento de no discutir para no generar ningún tipo de conflicto por más insignificantes que sean, pero en realidad nuestra disconformidad no desaparece, sino que solo se incrementa hasta transformarse en una bomba de tiempo. Continuamente, de esto suele tener la culpa de que comprendamos una discusión como algo extremadamente negativo, perjudicial para nuestra relación amorosa. A parte, muchos equiparan esa discusión con un pleito.
Se dice que discutir puede ser bueno para una relación, claro si se hace de la manera adecuada. Las discusiones que se llevan a cabo de manera serena y del modo adecuado, aprenderás muchas cosas que no conocías de tu pareja, encontraras cosas que le preocupan y entenderás cuales son esos puntos que es mejor no presionar con el único fin de evitar nuevas confrontaciones.
7. Salir del ciclo de culpar / sentirse culpable:
Cuando entres en un problema, especialmente si tú lo comenzaste, enseguida se apodera de ti el sentimiento de culpa, lo que genera agresividad hacia la otra persona ya que inconscientemente, estás completamente convencido de que esa otra persona tiene la culpa de que tú te sientas avergonzado de tu aptitud. Es entonces, de la etapa de culpabilidad, pasa a culpar al otro, convirtiendo la situación de problema tras problema. Y otra vez sientes culpabilidad, es algo como un círculo vicioso.
Este ciclo de culpa o de sentirse culpable puede ser convertirse en algo infinito y las discusiones solo aumentaran cada vez más. Si no quieres una ruptura con tu pareja, da el primer paso en acabar con este ciclo. Empieza con lo fácil: perdónate a ti mismo o a las personas que realmente quieres. Permítete no tener la sensación de culpa por el problema y no culpes a la otra persona por aquello.