Los hombres suelen tener prioridades diferentes al momento de seleccionar a su pareja. En las salidas, ellos examinan y estudian ciertos comportamientos en las cuales se fundamentan para saber si dar o no otro paso en la relación. Por ende, no es un tema de superficialidad simplemente, el hombre puntea de forma exigente, lo que una mujer haga en las primeras citas para saber si puede o no, plantearse un futuro los dos.

No tener un tema de conversación: No tienes que ser una experta en el habla o tener temas de conversación. Con el sencillo hecho de tener “reciprocidad” en la plática, el hombre puede tener una sensación de gusto.
Falsas apariencias: Hablar con un acento que no es tuyo es una práctica común de las mujeres que no son verdaderamente auténticas, así que ten cuidado con esa y otras mañas extrañas.
Que vean como un banco al hombre: No es solo que presenten que pueden ser interesada, sino que además, si es probable, puede ofrecerse a pagar la mitad de la cuenta de lo que se consumió en la salida. Habitualmente el hombre, por modales, dirá que él pagara todo aun cuando tú ofreces ayuda, pero esto es algo de educación que tú misma te ofrezcas en ayudarlo con la cuenta.
Que no valoren sus amistades: No tienen que agradarte ni caerte bien, pero hablar mal de ellos y pretender ser mejores que ellos en cuanto a priorizarte, es un grave error.
Superficial y materialista: Si en la primera salida te enganchas a platicar de marcas, accesorios, ropas, carros y nada más que cosas materiales, tenlo por seguro que él te vera como una mujer plástica.
Falta de aspiraciones: Ellos buscan a una mujer de verdad, un que tiene que poseer aspiraciones, metas y ganas de crecer como persona.