El miedo es ese sentimiento de desconfianza que impulsa a creer que ocurrirá un hecho contrario a lo que se desea. Es ese oponente que nos limita muchas veces a realizar lo que queremos, a avanzar para cumplir sueños y metas.
Cuando se tiene miedo, se tiene temor a hacer algo y fracasar, y este es el principal culpable a acostumbrarse a lo cotidiano, a no salir de esa zona confort, que, de alguna u otra manera, por más que nos agobie, nos mantiene “resguardados” o “protegido” a una posible derrota.

Por lo general, las personas con miedo a salir de su zona de confort, dicen lo siguiente:
- “No soy lo suficientemente valioso y no sirvo para eso”: Es un grave problema de autoestima que aplica en todos los ámbitos de la vida, sobre todo del lado laboral.
Este tormentoso pensamiento surge del síndrome del impostor, un problema en el que se compara con los demás y se cree que no se es lo suficiente para tener un mejor puesto de trabajo o tener éxito en una entrevista.
- “Todo tiene que estar perfecto”: El perfeccionismo también tiene su lado oscuro y es un gran aliado de la zona de confort. Permitirse cometer errores es una forma de salir de la misma; desafortunadamente, la sociedad ha difundido a los errores como equivalente del fracaso y no como una manera de aprendizaje, por lo que muchas personas temen inmensamente a equivocarse. Los errores son parte de crecer, vivir y está bien.
- “Ya tengo mucho”: El conformismo es un freno para que no se salga de la zona de confort; muchas personas tienden a ser reactivas en vez de proactivas, lo mismo que no les permite avanzar y quedarse estancados con lo que ya tienen.

- “No quiero arriesgarme”: Cuando se tiene un plan en mente, parece sumamente fabuloso, incluso cuando se dice en voz alta sigue sonando fabuloso; el problema es cuando se empieza a ejecutar, pues es ahí en donde ya no nos sentimos cómodos, dejando que la zona de confort logre vencernos y tenernos en su dominio.
- “Estoy muy ocupado”: Se aplazan decisiones, se es perezoso para hacer cosas nuevas y nos estancamos en la rutina. Si se quiere salir de la zona de confort, lo mejor es ser productivo y darle importancia a las cosas que pueden traer un beneficio.