Ser fuerte consiste en tener la capacidad de enfrentarse a todas las circunstancias de la vida. Puede sonar algo difícil, sin embargo, es posible conseguir la fortaleza necesaria para superar todos los obstáculos. Acá les mostramos 5 enseñanzas que ayudan a tener confianza en las habilidades que tenemos, y además saber ponerlas en práctica cuando la situación lo amerite.
1. Vivir hoy
¿Qué quiere decir esto? Esta pregunta apunta a que lo importante es recordar que lo único que tenemos “por seguro” es el presente. El pasado ya ocurrió y el futuro es incierto. Podemos pensar en el futuro, pero que eso no nos quite la capacidad de vivir el presente. Enfoquémonos en lo que pasa hoy.
2. Construir día a día
Si construimos día a día nuestro existir, seremos más conscientes de las cosas que hemos logrado. Entonces, cuando estemos atravesando por un mal momento recordaremos que el esfuerzo que hemos hecho valió la pena. Comprender esta realidad es una buena manera de volverse más fuerte.
3. Romper el cascarón
Tenemos que salir de nuestra zona de confort. Si bien sabemos que es imposible controlar todo en la vida, y que tendremos experiencias negativas, vale la pena vivirlas. No hay que evitar romper el cascarón, por miedo a sufrir, sino que todo lo contrario. Si nos animamos a dar un paso más allá, saldremos fortalecidos, siempre valdrá la pena hacer el esfuerzo, y así ganar en grande.
4. Cultivar nuestro interior
Es importante que aprendamos a cultivarnos interiormente. Para esto, es bueno acercarnos a experiencias y textos que nos sirvan para mejorar y aumentar nuestra fortaleza interior. Por ejemplo, libros de filosofía, literatura, religiones, etc. Así tendremos una fortaleza que emerja del interior al exterior.
5. Aprender del pasado
Una de las maneras de hacernos fuertes es aprender de los errores. Lo que hemos hecho, hecho está, es imposible modificarlo. El pasado no se puede cambiar, y si se pudiera ¿de qué nos serviría? Está en nosotros saber cómo aprovechar esa lección y no volver a repetirla.