No podemos evitar los problemas que se tiene con el ser amado, porque siempre hay diferencias en pensar, diferencias en actuar y sobre todo diferentes formas de amar. Pero lo que si podemos hacer es adelantarnos a los hechos y actuar con mayor claridad para poder llegar a una solución y salir bien de este problema.
No caigamos en estos elementos que puede separar hasta las mejores parejas.
La Crítica
La crítica que mata a las relaciones son aquellas que se hace con el fin de herir los sentimientos de la otra persona, es decir la crítica destructiva.
Este tipo de críticas tiene como objetivo que la pareja se sienta culpable de lo que pasa en la relación.
El desprecio
El desprecio se puede demostrar de diferentes formas: sarcasmo, apodos hirientes, caras y gestos de indiferencia, entre otras. Esto hace que la persona se siente en desconfianza e inferior llevándolo a la separación y/o divorcio.
Estar a la defensiva
Cuando una persona está a la defensiva suele culpar de todo a la otra persona, haciendo que la otra persona sienta el peso de toda la relación. Esto puede resultar la muerte total del amor y la búsqueda del divorcio.
Buscar evasivas
Quien esté haciendo de víctima en esta relación, es quien levanta un muro emocional para protegerse, dejando a la otra persona lejos de las posibilidades de arreglar la relación. Este muro busca minimizar la comunicación para evitar seguir siendo herido.
La relación de pareja es un compromiso de los dos. No puede uno trabajar más que el otro, tiene que ser algo mutuo para que funcione.
Queda bastante claro que la razón por la que se dan estos 4 elementos es porque uno de los miembros está demostrando desinterés en la relación.
Tenemos que ser consciente de lo que sucede y arreglar la situación como personas inteligentes y luchar por lo que verdaderamente amamos.