Mucho se habla de lo que es el amor, y dentro de tantos conceptos, hay uno que se ha predicado mucho a través del tiempo, y es una manera inequívoca del amor, ese que relatan las películas y los libros, los tratan de una historia perfecta, donde todo es magia fantasía, sin embargo, esta idea equivocada del amor nos puede llevar al dolor más grande.

Aunque mucho nos digan, investiguemos, o tratemos de conseguir algún significado lógico sobre lo que es realmente el amor, aun así, podemos llegar al punto de sentirnos engañados por el amor, pues este en verdad es un universo lleno de misterio e incertidumbre.
Y es que, aunque no lo parezca, nos seguimos encontrando con relaciones que parecen perfectas, pero en realidad son tóxicas y es tanta nuestra ingenuidad que terminamos por asumir que ciertas conductas violentas o abusivas son realmente muestras de amor.
Tanto en hombres como mujeres, esas conductas revelan problemas internos, y no es nuestra labor repararlas, y permanecer en esas relaciones solo hará que nos convirtamos en parte del problema y no en la solución.
Y para esto, presentamos algunos puntos que debemos considerar:
- Nos llama o manda mensajes todo el tiempo: Es normal que al inicio de una relación el contacto con la pareja sea constante, como si no nos pudiéramos llenar, pero eso cambia al paso del tiempo, quizá no en esa cantidad, pero aun así confiamos y podemos pasar tiempo a parte.

El problema está cuando la pareja se molesta porque no le contestamos de inmediato, aun cuando tenemos motivos como escuela, trabajo, asuntos familiares, etc.
- Está al tanto de dónde estamos en todo tiempo: Una cosa es la preocupación por la seguridad, pero otra muy distinta es insistir en saber todo detalle, lo peor es que juran que es por amor. Eso es inseguridad personal. Cuando hay amor, respeto y confianza, no hay este tipo de estrés en la relación.
- Siempre quiere estar, no quiere conocer a nuestros amigos ni presentarnos a los suyos: Cuando nos enamoramos, deseamos que esa persona maravillosa sea parte de nuestro mundo y que conviva con nuestros seres queridos, como si fuera un rompecabezas y él o ella la pieza faltante. Pero ese paso no llega.

La pareja no se preocupa por conocer a nuestro círculo cercano o presentarnos al suyo. A la larga, la relación se torna sofocante. Una relación sana tiene espacio para que ambas partes socialicen con otras personas y disfruten tiempo con los seres queridos de ambos.
Con información de Though Catalog.