El estrés, la ansiedad y la fatiga son parte de la vida de cada día, por fortuna hay remedios naturales para disminuirlo, uno de ellos es el té de manzanilla que es muy famoso por sus componentes antiinflamatorias y tranquilizantes, y ni qué menciona de su agradable sabor.
Además, el té de manzanilla tiene grandes ventajas digestivas, por lo que se sugiere beber una taza luego de comer para calmar dolores o aliviar la pesadez.
Estos son sólo algunos de los grandes beneficios de este remedio natural y probablemente ahora querrás conocer cómo preparar el té de manzanilla para tranquilizarte. Estos son las dos formas que puede hacer un té.
Té de manzanilla con manzana.
Ingredientes:
- 2 cucharaditas de flores de manzanilla frescas
- 3 tazas de agua hirviendo
- 2 manzanas cortadas en rodajas
- Miel al gusto
Preparación:
- Lava bien las flores con agua fría
- Pon a hervir un poco de agua (una taza)
- Añade las rodajas de manzana y trata de aplastarlas
- Agrega las flores de manzanilla y 2 tazas de agua hirviendo
- Deja reposar durante de tres a cinco minutos
- Usando un colador, sirve en una taza
- Si gustas puedes endulzarlo con un poco de miel
Té de manzanilla y Jengibre.
Ingredientes:
- 2 tazas de agua
- 1 y ½ cucharada de miel
- ½ cucharada de jengibre fresco rallado
- 3 bolsas de té de manzanilla
Preparación:
- Pon a hervir el agua (dos tazas) durante unos cinco minutos
- Agrega miel, el jengibre y las bolsas de manzanilla
- Deja reposar cinco minutos
- Sirve y si gustas añade un poco más de miel
Lo aconsejable es que tomes estas infusiones luego de cenar para que te calmes y puedas descansar bien.