Muchas mujeres caen el error de pensar que un hombre deja a su amante para siempre. El psicoterapeuta, Rodolfo Gallo Pérez afirma que la mayoría de los hombres infieles regresan a buscar a su amante, sin embrago, a pesar de que esto se ha comprobado muchas veces, muchas mujeres aun no lo entienden ni aceptan.
El psicoterapeuta dice que cuando un infiel vuelve a casa es porque no encuentra la estabilidad afuera, extraña a los hijos y también vuelve por amor.
No obstante, a pesar de que regrese a casa después de un descanso, puede volver a buscar a su amante o alguna ex pareja en su vida pasada.
La mayoría de los hombres casados que son infieles no dejan su hogar porque no tienen seguridad para irse con su amante, porque temen que les hagan lo mismo afirma el especialista.
Es la razón principal por la que la amante no puede convencer al esposo a dejar a la esposa e irse con ella, así lo afirma el psicoterapeuta.
El infiel puede llegar a pensar que su amante es la mujer ideal, pero todo cambia cuando la tiene todos los días porque una familia o relación no se sostienen con un buen desempeño en la intimidad.
El infiel sabe plenamente que lo que hace está mal y no existe ninguna manera de justificarlo, es por eso que su pensamiento se va modificando de manera que él quede lo menos mal posible.
Ellos le apuestan a que la responsabilidad de su acto de no compromiso recaiga en las omisiones o actitudes que no le agradan de su pareja, así es como piensa un hombre casado infiel.
Por lo general un hombre casado infiel dirá que lo hace porque así se lo exige su “naturaleza” masculina. Buscará fallas y defectos en su esposa para mitigar su culpabilidad generada por el mismo conocimiento de que está haciendo algo malo.
Entonces dirá que su esposa no es lo suficientemente cariñosa con él o no le pone la atención que él desearía y por eso lo busca en otra parte, pero eso no es justificante.