Has sufrido tu primera decepción, esa que tal vez nunca olvidarás pues ha ocurrido con el primer amor de tu vida. Has hecho a un lado lo risueño de ti, y sólo quieres permanecer sola ya que tu corazón está demasiado roto como para considerar estar con alguien más.
Pasan los meses y con esfuerzo y paciencia te has aliado al tiempo para recuperarte del daño, y sin esperarlo un nuevo amor se asoma justo cuando más lo necesitabas.
Ocurre rápidamente: manos que se buscan sin decirlo, ojos que cruzan miradas que dicen más que mil palabras, y todo sin haberlo planeado. Nuestro corazón se emociona rápidamente y nuestro estómago deja revolotear cientos de mariposas a la vez.
Volvemos a experimentar esa primera etapa del amor donde todo es color de rosa, donde él y tú son capaces de todo sólo si están juntos. La sonrisa vuelve a tu rostro y te experimentas renovada por dentro y por fuera, queriendo entregarte a ese sentimiento como si no hubiese un mañana.
Pero así como sobrevienen pensamientos agradables también puede surgir la duda de cómo acercarte a él sin verte demasiado apresurada. La timidez es un arma de doble filo, que por un lado puede ayudarte a dejar que todo fluya como debe fluir o cohibirte de dar ese primer paso que tal vez él está esperando…
Pues déjame decirte que no hay fórmula para saber el momento correcto. No importa la cantidad de tiempo que lleves conociendo a esa persona sino la genuinidad de lo que sientes. Pasarte el día dando vueltas en ello es una pérdida de tiempo, pues no puedes sacar cuenta del tiempo de calidad que han pasado.
Recuerda también que un “te amo” se dice de muchas maneras, aun cuando no haya palabras. Las miradas y roces involuntarios con esa persona y vivir experiencias únicas en su compañía son algunas manifestaciones de los comportamientos de alguien enamorado, así que sólo tú sabes cuál es el mejor momento para declararte.
Conversa contigo misma y asegúrate de que lo que sientes es amor verdadero y no sólo un capricho o una confusión. Ser honesta contigo primero antes que con los demás es un gran paso hacia la libre expresión de tus sentimientos.
Así que si luego de una ruptura que dejó secuelas negativas en tu vida se presenta una nueva oportunidad de amar, revisa si estás lista y da el primer paso si es necesario. Ante esto, ¿qué es lo peor que puede pasar si hablas con la verdad?