Decir que queremos un amor perfecto sería una verdad a medias.
Pues mucho deseamos uno sin defectos, pero al mismo tiempo nuestra parte racional grita recordándonos que eso es imposible.
Y así, se crea una eterna disputa entre lo que queremos y lo que en realidad podemos tener.
El amor que todos queremos es maravilloso, es ese que nos hace volar y nos recuerda a diario lo maravillosa que somos.
Pero, el amor que podemos tener, ¿puede alcanzar realmente eso? Sí, pero seamos realista, no todos son así.
Son pocos los amores que nos hacen sentir completamente especiales. Tendemos a entregar el corazón unas 3 veces al menos antes de coincidir con alguien que nos haga sentir de esa manera.
No es que escaseen, es que es realmente complicado hacer que dos almas gemelas coincidan en este mundo.
Por ello, es importante que no dejemos de creer en el amor aún cuando nos parten en mil pedazos.
Es importante que sigamos adelante y no nos rindamos, es importante que sigamos creyendo que hay alguien ahí fuera que está hecho para nosotras.
No, no se trata de un príncipe azul sin ningún defecto, sino de alguien que definitivamente entiende que algunos defectos son parte de sí, pero que aún así puede hacer mil cosas más para que dichos defectos no nos afecten.
El amor que se quiere, es uno que nos convenga. Un amor que simplemente no nos cause dolores de cabeza, nos de paz y nos apoye cuando realmente lo necesitemos.
https://www.facebook.com/utopico1/videos/1471073206325038/