Sabes que estás haciendo mal pero no te importa. La adrenalina y la sensación de dejarte llevar por los sentimientos te abordan y pierdes el juicio totalmente respecto a lo que pueda pasar de aquí en adelante. El presente es lo que te interesa y satisfacer tu deseo es lo importante. Te sientes imposible e imbatible pero, mi estimado/a, todo esto no es más que una mera ilusión.
Las personas que se caracterizan por ser infieles están más expuestos a situaciones desagradables, en comparación con aquellos que son honestos y fieles a su pareja. Y es que mantener una doble vida puede ser dañino a la salud a largo plazo, según la opinión de expertos. Por eso, te traemos algunos peligros de ser infiel para que lo tomes en cuenta antes de tomar esa decisión.
–#1 mayores niveles de estrés y ansiedad.
Las personas infieles deben estar constantemente al pendiente de satisfacer los caprichos de la persona con la que cometen la infidelidad sin que su pareja legal se entere, lo cual les otorga un enorme estrés que, en ocasiones, puede ser fatal. Del mismo modo, la ansiedad de ser descubierto puede desencadenar serios problemas emocionales a futuro, así que cuidado.
–#2 Obtendrás una mala reputación.
Si engañas amorosamente a las personas por doquier y piensas salirte con la tuya como si nada hubiera sucedido, pues me lamento que no es así. Los comentarios negativos se trasladan a una velocidad mayor que el rayo y si empiezas con mal pie en tus últimas relaciones, te aseguro que eso repercutirá en el futuro y nadie querrá estar contigo.
–#3 Puedes generar situaciones incómodas.
¿A quién le gusta ser humillado públicamente en la calle por su pareja cuando tiene un affaire con alguien más? ¿Realmente quieres generar un episodio violento entre las dos personas que tienen un rol amoroso contigo? Estas circunstancias están a flor de piel para cualquier infiel. Piensa cuidadosamente si realmente quieres esto en tu vida.