Dejarte ir, es perderlo todo.

770

¡Ah! ¡Cuánta fortuna hay en el hombre al que ella posee!

Y qué dolor escuchar su risa solo en el recuerdo.

Ads

 

Ads

Si la dejas ir, pierdes todo. Pierdes el derecho a las mejores caricias y los besos más provocativos. Pierdes la dicha de que alguien se preocupe honestamente por ti y pierdes la vida más valiosa que habrás podido tener en tus manos.

Preguntarás ¿Por qué si sé que ella vale tanto, entonces me permití perderla?

Por idiota,

Ads

por imbécil

y por necio.

No hay otra explicación, ella llegó siendo la indicada y se marchó siéndolo también, solo que, durante el periodo que estuvo conmigo, menosprecié esa cualidad maravillosa que ella tiene de ser amada.

 

Si la dejas ir, ganas la posibilidad de oler su perfume, de escuchar su voz en los rincones de la casa y seguir al pie de la letra sus consejos, pero solo en el recuerdo, porque ella ya no estará ahí para pasear con su perfume en la ropa, mientras te da un consejo en cada esquina que se detiene.

 

Ads

Así que, no la pierdas, colega. No le des el gusto a la desdicha.

No la dejes ir, porque en ella hay mucho más amor del que encontrarás en cualquier otra mujer.

No la dejes ir, porque desde mi experiencia, sé que ella vale más que cualquier otra persona.

No la dejes ir,  idiota. Si se va, que sea por su cuenta, pero nunca le des tú, la razón de abrir la puerta de la casa, dejar las esquinas vacías, los consejos en el olvido y el perfume a lo largo de su camino sin retorno.

 

Escrito por: Ángel Dichy.

Ads