Un mentiroso patológico o mitómano, es una persona que se siente impulsada a inventar historias y hechos falsos de manera compulsivas. Los mitómanos se sienten bien al decir mentiras y creen que es la mejor manera para obtener lo que quieren. No solo eso, también pueden subir su autoestima a través de las mentiras y en los casos más graves, llegar a creerse sus propias historias falsas.
Detectarlos puede ser complicado, más cuando esta persona ha perfeccionado su habilidad para que sus historias parezcan siempre tener una coartada. Miles de parejas terminan su relación de manera muy dramática a causa de la mitomanía. El gran peligro de esta enfermedad en las relaciones, es que puedes durar años con un enfermo mental de estos y que toda la relación se forme en base a una mentira, sin saberlo.
Ahora te diremos cuáles son los rasgos psicológicos y de conductas más notorios de los mitómanos para que puedas detectarlos a tiempo.
- Excesivo drama: En las relaciones, las historias dramáticas de novela, suelen ser una forma de manipulación por parte del mitómano. Cuando la historia sea muy sorprendente para creértela, entonces dúdalo. De hecho, lo sano sería siempre dudar sobre la palabra del otro, pero cuando se está en una relación, posiblemente esta duda llevará al mitómano a colocarse muy a la defensiva.
- Reacción al descubrir una mentira o ponerla en duda: Algo que tienen en común los mitómanos, es que por muy pequeña que sea su mentira, si se descubre, adoptará una posición agresiva y tratará de acusarte de desconfiada. Otra actitud común en el mitómano al ser descubierto, es la de hacerse la víctima y sacar a relucir tus defectos como una manera de cambiar de tema.
- Se adueña de las historias de otros: Si te enteras de alguna manera de que tu pareja está contándote una historia que no es suya, pero lo hace como si fuera el protagonista, estás frente a un mitómano en potencia.
- Evasión de preguntas: Cuando comienzas a indagar en las historias de los mitómanos, ellos tratarán de responderte hasta cierto punto. Pero como dicen, “la mentira tiene patas cortas”, así que no llegarán muy lejos. Cuando comience a quedarse sin respuestas, evadirá las preguntas y puede que se coloque a la defensiva y adopte una conducta agresiva.
- Lenguaje corporal del mitómano: Esta manera de detectar a un mitómano es la más segura, pero también la más difícil. Te doy una lista de gestos típicos de una persona que miente, incluso sin necesidad de ser un mitómano. Vale destacar que, por ser una condición especial, los mentirosos patológicos pueden llegar a incluso ocultar parte de estos gestos.
- Cuando comienzas a hacerles preguntas, pueden llegarse a rascarse la punta de la nariz de forma frenética. A no ser que tenga alergia, esa zona es como un ancla para el mitómano que está a punto de ser descubierto.
- El dolor en la nuca aparece de la nada cuando comienzas a hacer preguntas. Así que si lo ves tocarse la parte de atrás del cuello mientras intenta responder, ya sabes lo que sucede.
- Muchos pueden creer que las miradas fijas son un símbolo de seguridad en las personas que cuentan alguna historia, pero no. Los mitómanos suelen mirar muy fijamente a la cara de a quien le mienten para asegurarse de que sus historias son creídas.
Foto de la serie Lie To Me - Cuando comienzas hacer preguntas y la persona cubre sus partes íntimas con ambas manos, se está sintiendo atacado.
Es importantísimo mantenerse alejados de este tipo de personas. A no ser que le quieras ayudar y estés consiente de su condición, sus mentirás también podrán hacerte daño.