Sé que lo amas, que piensas en él cada segundo de tu existencia. Aunque cada latido de tu corazón lleva grabado su nombre y sientes que un beso bastaría para devolverte la vida, no le escribas esta noche.
Es el hombre de tus sueños, ese que tiene todo lo que siempre quisiste en alguien. Deseas pasar el resto de tu vida con él, formar una familia y tener uno o tal vez dos hermosos hijos. No quieres despegarte un minuto de él, pero por favor no lo contactes hoy.
Sin importar lo mucho que le des todo, que sea el sol que te despierta cada mañana y la luna que te arrulla cada noche. Que sea el brillo de tus días oscuros y la fuerza para seguir adelante. Que sientes que sin sus besos no tienes el aliento suficiente para respirar.
Todos saben de tus sentimientos hacia él: amigos, familiares, compañeros de trabajo, aunque también saben que él no te valora como mereces y es algo que no entiendes por más que te lo expliquen. Es por esa sencilla razón que no debes escribirle esta noche, ni mañana al despertar.
Es más: no le escribas ni pasado mañana, ni la próxima semana, ni el mes entrante y jamás. Comprende que lo que te ha prometido no te lo ha dado nunca, que te ilusiona con cada palabra para luego romperte el corazón con sus acciones contrarias.
No pierdas más el tiempo alimentando una fantasía que sólo está en tu cabeza. Todo lo que te dijo era mentira y hoy se mantiene, y hasta tú puedes dar fe de eso pero te mantienes ciega. No le escribas de nuevo jamás si en verdad te amas porque él no merece de ti ni los buenos días.
